Tineo,

E. PELÁEZ

El Carbayón de Valentín, de Tineo, fue distinguido con el premio «Árbol gigante» 2008. La distinción llega en un momento de polémica sobre el futuro del monte Armayán, ya que el empresario Victorino Alonso pretende abrir una mina a cielo abierto que ocupará 17,1 hectáreas de ese espacio. No pudo evitar el alcalde tinetense, Marcelino Marcos Líndez, acordarse de este conflicto al comprobar que una de las categorías galardonadas era la de bosque amenazado. «Es una ironía con la situación que vivimos con el monte Armayán», dijo el regidor.

El Ayuntamiento había presentado dos candidaturas a los premios que concede la ONG Bosques sin Fronteras en colaboración con el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino y la empresa Bosques Naturales: la fayona de Eiros y el carbayón de Valentín. Este último fue galardonado en la categoría «Árbol gigante», tras considerar el jurado que las grandes dimensiones de este roble y su longevidad eran razones suficientes para otorgarle este galardón, consistente en un diploma y 3.000 euros de dotación económica destinados a la promoción y mejora del entorno del ejemplar.

El Ayuntamiento de Tineo tiene previsto recoger bellotas de este árbol, que fue declarado monumento natural, y trasladarlas a un vivero con el objetivo de conseguir otros ejemplares para plantarlos en espacios públicos del concejo. Este árbol tiene 7,7 metros de perímetro, 13 metros de altura y 15 metros de diámetro de copa. Nació alrededor de 1160, pero la historia de su apellido se forma unos 200 años después, cuando una influyente familia leonesa apellidada Valentín, descendiente del pontífice San Valentiniano, se instala en Tineo.

El patriarca de la familia adquirió la finca y construyó una casa palacio y una capilla. Bajo él se han realizado pactos y juramentos que se encuentran documentados en escritos históricos datados antes del descubrimiento de América.

Otro árbol asturiano que fue distinguido, en la categoría de «Árbol más longevo», es el tejo de la iglesia de Bermiego, en el concejo de Quirós. Junto a él figuran como premiados, de entre las noventa candidaturas presentadas, la olma de Pareja, en la provincia de Guadalajara, en la categoría de «Árbol cuidado», y el bosque del pazo de Cascaxide, en Pontevedra, como «Bosque amenazado». La olivera Gorda, que se encuentra en Murcia, recibió una mención especial como «Árbol histórico», una categoría que quedó desierta.