Tapia

Tapia de Casariego lleva cuatro años en vilo, sin saber si, finalmente, la mina de oro de Salave se convertirá en una realidad.

Desde que se conocieron las pretensiones de la empresa aurífera Río Narcea Gold Mines, que en 2005 pretendía excavar un cráter de 600 metros de diámetro y 212 metros de profundidad para extraer el oro de las entrañas de Tapia de Casariego, el pueblo está en pie de guerra porque, aunque, en principio, el proyecto se desechó, lo cierto es que el Principado ha dejado una puerta abierta a realizar una nueva prospección.

Este proyecto fue polémico desde el principio, ya que se trataba de abrir una mina a cielo abierto en un entorno costero y de gran valor ambiental y paisajístico, en los aledaños de los lagos de Silva. Río Narcea presentó su proyecto y aseguró que la explotación crearía más de cien empleos; además, se comprometió a que, una vez finalizada la extracción de oro, se llevaría a cabo una mejora del entorno. Pero los vecinos de Tapia no quisieron saber nada de este proyecto que, según ellos, acabaría con un espacio que debería estar protegido (el 4 de octubre de 2008 PP e IU aprobaron, con los votos en contra del PSOE, la declaración de espacio natural protegido para los lagos de Silva) y además, ocasionaría un grave deterioro en una zona costera que vive del turismo. Así, los vecinos formaron la plataforma «Oro No», que salió a la calle y presionó hasta conseguir que el gobierno municipal, del PP, mostrase también su rechazo a la obra. Finalmente, el alcalde, Gervasio Acevedo, quien, en principio, no se posicionaba ni de un lado ni de otro, acabó asegurando públicamente que estaba en contra de la explotación. El Principado también se suma a la negativa y niega a la empresa canadiense los permisos para poner en marca la explotación. Río Narcea desiste entonces de sus pretensiones y abandona el proyecto, pero se embarca en un pleito con el Principado por no concederle las licencias. De momento, se han resuelto dos de los cuatro contenciosos abiertos con la empresa minera y los dos se han fallado a favor del Principado (la última resolución se conoció en enero de este año).

Ahora, cuando ya el pueblo comenzaba a olvidarse de este proyecto, otra empresa, Exploraciones del Cantábrico, filial de Río Narcea Gold Mines, inicia una exploración en la zona para buscar oro a través de una galería. Esta empresa quiere construir una galería, con emboquille en A Pontraviza, que llegaría hasta Cortaficio y que tendría una profundidad de 39 metros sobre el nivel del mar. El caso es que este proyecto se encuentra en fase de tramitación ambiental y el Principado asegura que nada tiene que ver con el anterior, ya que se trata, según el Ejecutivo, de una «investigación complementaria». Tapia, de momento, no se fía, y la plataforma sigue diciendo: «Oro no», a Río Narcea y a quien sea.