Villanueva de Oscos,

T. CASCUDO

Finalmente, tras un largo proceso, el Principado se ha hecho con toda la propiedad del monasterio de Santa María, en Villanueva de Oscos. Quedaba tan sólo una quinta parte del inmueble en manos privadas que desde ayer es propiedad regional al hacerse efectivo el trámite de expropiación forzosa. Dicha expropiación se ha gestado alegando incumplimiento por parte de los dueños del deber de conservación sobre todo bien declarado de Interés Cultural, calificación que posee el monasterio desde el año 1991.

El pasado quince de octubre se emitió el decreto que declaraba el interés social de la expropiación debido «a la falta del deber de conservación» y hoy, tras su publicación en el Boletín Oficial del Principado de Asturias (BOPA) de ayer, el decreto ha entrado en vigor. El alcalde de Villanueva, José Antonio González, considera positiva la noticia, aunque dice que le hubiera gustado más llegar a un acuerdo con los propietarios del porcentaje de monasterio pendiente de venta. «Era difícil el acuerdo y por eso se recurrió a la expropiación, ahora lo importante es que de una vez por todas la propiedad esté en manos del Principado», explica el regidor.

El decreto de expropiación publicado ayer indica que el inmueble está compuesto por cinco fincas pertenecientes originalmente a diferentes propietarios. Cuatro de ellas son patrimonio del Principado desde hace años y la última finca era la única en manos privadas. Es precisamente esta última la que presenta un estado de conservación peor y su deterioro es visible ya que el edificio en esa zona, que linda con el río, está prácticamente devorado por la maleza.

El Alcalde, que en varias ocasiones pidió agilidad en la resolución de los trámites para dotar de contenido a este monasterio, se felicita por la conclusión de los trámites por cuanto supone «un paso más en el compromiso que adquirió el Principado y por tanto me alegro de que sigan dando pasos aunque sean pequeños».

Lo que sigue sin conocerse es el proyecto que dará un nuevo uso para este cenobio. En un primer momento se habló del desarrollo de una iniciativa de tipo turístico, un proyecto similar al que se ejecuta en Corias, pero de momento no hay nada definido, como subraya el propio Alcalde.

La declaración de Bien de Interés Cultural se produjo en el año 1991 tras una importante obra de restauración que ejecutó el Principado entre 1987 y 1988. Posterioremente, en el año 2000 se realizaron una serie de obras de mejora que se centraron en la reparación de la cubierta y su saneamiento. Desde entonces poco más se ha hecho en este impresionante inmueble ubicado justo en el centro de Villanueva.

El monasterio fue fundado en el siglo XII por la orden de San Benito para pasar después a la orden de San Bernardo y es uno de los tres únicos monasterios cistercienses que hubo en Asturias junto al de Lapedo en Belmonte y el de Valdediós en Villaviciosa, según la información publicada en el BOPA. El monasterio fue durante años elemento dinamizador de la comarca sobre la que ejerció un importante dominio económico, social y político. Ahora Villanueva quiere devolverle parte de su esplendor.