Villarín (Somiedo),

V. DÍAZ PEÑAS

«Villarina», la osezna encontrada herida por unos turistas en una cuneta de Somiedo y devuelta a su hábitat hace algo más de un año, pasó la Nochevieja fuera de la osera. Así se aprecia en una fotografía tomada por el Fondo para la Protección de los Animales Salvajes (FAPAS) donde se ve al animal buscando alimento por los bosques somedanos. El hecho de que la hembra se comporte como otros osos que habitan en la zona, hace pensar que se ha reintegrado de manera completa al medio.

«Villarina» fue devuelta a los bosques en otoño de 2008, tras ser tratada durante todo el verano en cautividad. Fue soltada con un dispositivo que permitía su localización del que se desprendió posteriormente. Desde entonces, el Fapas instaló cámaras fotográficas y de vídeo para comprobar su evolución. En los últimos meses se ha podido comprobar el buen estado de «Villarina» y su óptima reintegración en su medio.

Las últimas imágenes que se han conseguido de la osa son de las últimas semanas de diciembre. Se dedicó en los últimos días a buscar comida en la zona baja del valle consumiendo castañas que aún se mantienen frescas bajo las hojas caídas. Como se apunta desde el FAPAS, la comparación de estas fotos con las de otros osos captados en la misma zona permite calcular que la osezna tenga un peso que ronda entre los 60 y los 70 kilos. Además, añaden, muestra una apariencia excelente y con un pelo denso que la resguarda del frío.

Gracias a las fotografías, se sabe que «Villarina» comparte territorio con un gran oso macho y con otro ejemplar mayor que ella. Además, también tiene contacto asiduo con zorros y lobos, con los que no parece tener problemas. La nieve tampoco parecer ser un problema para este animal que se resiste a entrar a la osera para hibernar.