El muro de la plaza de Tablao sirve para marcar terreno privado, según el dueño

Pepe RODRÍGUEZ

Los vecinos de Tablao, que reclaman que se derribe un muro que ha sido construido en la plaza del pueblo, no tendrán fácil lograr su objetivo. Serafín Rodríguez Bellido, el promotor del levantamiento del muro, asegura que el terreno es de su propiedad y no tiene ninguna intención de dar marcha atrás.

Rodríguez asegura que se llevó una buena sorpresa cuando vio en LA NUEVA ESPAÑA a los habitantes de Tablao denunciar la construcción de la pared en un espacio que consideran público y argumenta que «eso siempre ha sido de la familia de mi mujer, siempre. En 1993, y tengo aquí el papel, nos pidieron el favor de dejar ese hueco para poner los contenedores con la condición de que, en cuando lo necesitásemos, dispondríamos del terreno sin ningún impedimento. Dijimos que sí, pues no vivíamos allí. No solíamos ir todos los años».

Los problemas comenzaron cuando, según el propietario, en una de sus ausencias se tiraron las paredes que allí había y se asfaltó el terreno. Rodríguez cuenta que «ya entonces protestamos y pedimos que se quitaran los contenedores. Siempre nos decían "el año que viene", pero como no volvíamos a pasar por allí, pues la cosa quedaba exactamente igual. Y, más adelante, hasta pusieron barandillas de madera y un tablón de anuncios».

Finalmente, la familia acudió al Ayuntamiento de Degaña para solicitar licencia de construcción y levantar el muro. Serafín Rodríguez precisa que «incluso excavamos los cimientos antiguos de la propiedad para no coger ni un centímetro público, y nadie dijo nada hasta ahora».