Cornellana (Salas),

Lorena VALDÉS

Las obras del monasterio de San Salvador de Cornellana (Salas) sufren un nuevo retraso: no se licitarán hasta 2011. El último convenio firmado por el Ministerio de Vivienda, el Principado y el Ayuntamiento de Salas el pasado mes de julio modificaba los suscritos en 2007, 2008 y 2009 y distribuía un presupuesto de 5,7 millones, en tres partidas, desde 2010 a 2012, para la rehabilitación del claustro y la parte este del monasterio, que albergará un hotel y el centro documental del Camino de Santiago del Norte. Sin embargo, finalmente, este año no se invertirá ni un solo euro en el monasterio, que en la actualidad se encuentra abandonado y en ruinas. El motivo, tal y como explicó ayer el Alcalde de Salas, José Manuel Menéndez, es que en el convenio se ha producido un cambio con «un deslizamiento en las partidas a 2011, 2012 y 2013».

El regidor socialista, que afirmó el pasado mes de junio que «si este año no se licitaba la obra, habría que decirle adiós», sigue mostrándose escéptico sobre el inicio del proyecto. «Desde el Ministerio me aseguran que esta vez es la definitiva y que en el primer semestre del próximo año se licitará la obra con toda seguridad, pero uno ya no sabe si creérselo o no, después de tantos retrasos», se queja el regidor.

Desde la inauguración en 2004 del albergue de peregrinos, instalado en la zona oeste junto a las escuelas taller y una sala multiusos, no se han ejecutado nuevos trabajos en el interior del edificio y el proyecto de rehabilitación suma ya doce años de demora. La iniciativa de recuperar este tesoro de estilo románico, una joya arquitectónica del concejo, fundado en el año 1024 y catalogado como Monumento Nacional en 1993, con reformas posteriores barrocas está llena de retrasos y de acuerdos incumplidos. El proceso se inició en 1998, con la celebración del congreso «Rehabilitación sostenible del patrimonio histórico», en Salas, lo que propició la puesta en marcha de la rehabilitación integral del edificio, para albergar un centro de documentación sobre el Camino de Santiago, un hotel, un albergue y salas para usos sociales, además de los propios eclesiásticos.

Las obras comenzaron en 1999 y en cinco años el Gobierno regional invirtió 4,4 millones de euros en la puesta en marcha de dos escuelas taller y un taller de empleo que se ocuparon de las obras en la plaza del oeste y el patio del este. El Ayuntamiento de Salas solicitó en varias ocasiones, sin fortuna, en estos últimos años la reanudación de las obras.

La belleza del claustro del monasterio de Cornellana, de planta cuadrada y dos pisos, impacta a primera vista. Pero también su lamentable estado de conservación, que hace que su interés artístico se haya visto mermado.

Los vecinos sueñan con que algún día el cenobio se convierta en un motor para el turismo de la zona, pero las cuatro modificaciones que ha sufrido el proyecto ha suscita el desánimo entre vecinos y políticos. El paso del tiempo sigue causando estragos en un edificio que desde hace más de una década espera por una rehabilitación que le permita recuperar su esplendor de antaño. El monasterio de Cornellana tardará aún en ponerse guapo.