Valdés, A. M. SERRANO
El Principado reconoce «una avería» en una de las zonas de agua embalsada de la piscifactoría de Canero, en Valdés, que deja pasar a los peces al estanque, pero asegura que el problema ha estado controlado en todo momento y no se ha producido la muerte de cientos de alevines de salmón, como denuncian los pescadores de la zona. Los aficionados al río criticaron además la inoperancia de la administración para reparar la avería durante el periodo en el que esta especie se dirige al mar.
La Consejería de Medio Ambiente aseguró ayer que la guardería de la zona controló en todo momento la deficiencia en las instalaciones, aunque confirmó que «como consecuencia de esta avería se produjo la entrada puntual de alevines de salmón». «La Guardería de Medio Natural solicitó a la empresa el vaciado de la piscifactoría para que esos alevines pudiesen volver al río, al proceder a la apertura de los aliviaderos existentes en la instalación», indicarón ayer fuentes del departamento.
El Club de Pesca La Socala, que representa los intereses de los pescadores del Esva, critica la falta de vigilancia en los ríos. Su presidente, Gil Ramón Rico, asegura que «siempre hay que prevenir» este tipo de averías (en referencia a la rejilla que permanece abierta y sin un mecanismo para poder bajarla). Además, la sociedad llama la atención sobre la ausencia de actividad de la piscifactoria. El Principado, en cambio, matiza que durante la primavera se realizan labores de mantenimiento en los tres lagos, «ya que al tener la superficie de tierra se llenan de vegetación, por lo que de vez en cuando los llenan de agua para que este fenómeno no se produzca».
Los pescadores de la sociedad Fuentes del Narceal, al igual que el Club de Pesca La Socala, pidió ayer más prudencia y vigilancia en los ríos para evitar estas situaciones.
La polémica se produce a pocos días de que dé inicio la temporada de pesca de salmón con muerte, que celebrará su primer día el próximo domingo. Los pescadores critican que el Principado apoye la pesca sin muerte, activa desde la pasada temporada, «pero no tenga vigilancia suficiente sobre los ríos», para evitar averías como la detectada en el Esva.
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