Vilavedelle / La Linera (Castropol), T. CASCUDO

El Ayuntamiento de Castropol tiene grandes planes para los núcleos rurales de La Linera y Vilavedelle. Ambas poblaciones, ubicadas en un entorno privilegiado a orillas del estuario del Eo, serán objeto de sendos planes especiales de protección que permitirán que, a largo plazo, dispongan de todos los servicios. El regidor castropolense, José Ángel Pérez, confía en que esta mejora de sus infraestructuras logre fijar población y también impulsar el perfil turístico de ambos pueblos.

Tanto La Linera (A Lieira, según el topónimo local) como Vilavedelle son, para el regidor, núcleos «de gran singularidad», por lo que figuran dentro del Plan General de Ordenación (PGO) como pueblos de especial atención. Ambos planes especiales fueron aprobados de forma inicial a finales de septiembre y ahora se termina su fase de exposición al público, de modo que, en un corto período de tiempo, tendrán la aprobación definitiva.

El Plan Especial implica establecer unas normas que regulen las futuras construcciones y también establecer cauces para la rehabilitación de viviendas, pues en ambas localidades existen edificaciones abandonadas que podrían ser objeto de un plan rehabilitador. Pero, sobre todo, el Plan, según explica el regidor, establece la dotación de servicios básicos, como el saneamiento y el alcantarillado y también la pavimentación y la adecuación de las principales calles. «En definitiva, se busca aumentar el nivel de confort de los vecinos», precisa José Ángel Pérez.

En el caso del núcleo de La Linera existe una pequeña actuación de saneamiento, aunque incompleta. Por contra, admite el Alcalde, en Vilavedelle la red «está obsoleta».

Estos proyectos de remodelación también incluyen mejoras en las conducciones de agua y luz, así como la construcción de zonas de aparcamiento y de recreo. El problema de estos planes es la difícil situación económica, que ha motivado recortes en el número de inversiones que acometerá la Administración regional. No obstante, el regidor promete trabajar para lograr financiación presupuestaria que permita acometer de forma paulatina los trabajos de acondicionamiento. «Una vez estén listos, se van a revalorizar los terrenos y las viviendas y eso mejorará el núcleo», explica Pérez.

Una de las riquezas fundamentales de ambos núcleos es su proximidad a la ría. De hecho, La Linera está ubicada en la ensenada homónima del estuario. Esta pequeña localidad forma parte de la parroquia de Barres y no llega a los veinte habitantes, según el censo de 2006. Por contra, Vilavedelle -que está dividido en dos por la carretera nacional 640- suma 76 habitantes.