Boal, A. M. SERRANO

El Principado descarta ahora suprimir una unidad de Infantil en el colegio público Carlos Bousoño de Boal. El centro recibió ayer una resolución, sellada por la Consejería de Educación, en el que informa sobre su decisión de mantener la unidad y rectifica en su previsión anterior. El mismo departamento remitió a mediados de febrero las previsiones para el próximo curso, y en ellas no figuraba una plaza de docente para el ciclo de Infantil (alumnos de 3, 4 y 5 años). La asociación de padres rechazó esta propuesta y alegó contra las previsiones, al entender que cumplían con la ratio establecida (16 alumnos) para desdoblar en dos clases la Unidad.

El Gobierno regional aseguró ayer que la resolución no será definitiva hasta los próximos meses de mayo o junio. Los padres de los escolares de Boal ya emprendieron una cruzada similar el curso pasado, cuando la administración regional, entonces con el PSOE en el poder, también propuso suprimir esta unidad por falta de matrículas.

La portavoz de las familias boalesas, Irma García, se mostró ayer «satisfecha» con la resolución remitida al centro educativo y «con la rapidez» con la que ha respondido la administración regional. En sus alegaciones, remitidas la semana pasada, el colegio y la asociación de padres advertían del riesgo que corría la calidad de la Educación en el centro con la supresión de unidades. Además de informar sobre las características peculiares del colegio (ubicado en un concejo de alta montaña y con más dificultades y menos población que otros municipios de costa), aseguraban que se cumplía la ratio y que, por tanto, «no había motivos técnicos» para suprimir la unidad. Como ya ocurrió en 2011, amenazaron con protestas en caso de no lograr su objetivo. No ha hecho falta.