Tapia de Casariego,
A. M. SERRANO
Los padres de los alumnos del colegio de Tapia implicarán a todo el concejo en nuevas protestas si no logran un compromiso firme de la próxima administración regional para realizar una reforma en profundidad del centro educativo. Así lo hizo saber ayer la portavoz de las familias, Begoña González, tras la visita que realizó al colegio la consejera de Educación en funciones, Ana Isabel Álvarez. La componente del gobierno de Foro prometió que su partido promoverá una reforma integral si gana las elecciones. De hecho, precisó, había reservado una partida para los arreglos en el presupuesto regional que fue rechazado en la Junta General, lo que provocó el adelanto electoral.
«Los alumnos no entienden de política», suraya la portavoz de los padres, Begoña González, que exige acciones y hechos, más que palabras: «No podemos continuar viendo cómo se cae el colegio». González reunirá la próxima semana a todas las familias del centro para exponerles la situación y plantear la necesidad de nuevas movilizaciones si no se agiliza la rehabilitación de las instalaciones.
Tanto la dirección del centro como las familias pelean desde hace años para que se lleve a cabo en el edificio una obra importante. El centro tiene problemas en sus sistemas eléctricos y de calefacción y una de sus plantas carece de aseos. A ello se une el estado del exterior del edificio, que es lo más preocupante. Hace dos semanas, el Principado tuvo que tramitar un expediente de urgencia para afrontar unas obras en el patio. Uno de sus frontales tenía grandes grietas y su deterioro provocó desprendimientos.
