«Desengáñese, honorable swami, donde esté Ortega y Gasset que se quite ese petimetre amarillo (Confucio). Para entender éxito de bazares orientales hay que leer "Rebelión de masas"». Así le replica el honorable anciano Siau al swami Pashmarote Pancha en la última entrega de las descacharrantes aventuras del investigador creado por Eduardo Mendoza. FAC es más de Confucio, como demostró Álvarez-Cascos. Termina su andadura poniendo su corazón en ayuno y condenando al corazón de la ciudadanía tapiega a un ayuno forzoso de futuro más allá de diez años de devastaciones mineras. El PSOE, más orteguiano en boca de Javier Fernández, es por tanto más hábil en la estrategia de la venta al por mayor de productos de escasa calidad (como el discutido diputado número diecisiete, cuya honradez está en tela de juicio, y nunca mejor dicho) con el claro objetivo de que no se rompan las cadenas del progreso (je, je) ¿A Roberto Hartasánchez le irá más lo orteguiano o lo zen?