Castropol,

T. CASCUDO

El malestar que las obras de ampliación de la rampa del puerto de varada de Castropol está provocando entre los usuarios no ha hecho reflexionar al Principado. La Consejería de Fomento, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente sigue adelante con el plan previsto y defiende la ejecución de la actuación, pese a que se ha modificado el proyecto inicial que contemplaba asentar la rampa en un muro vertical y se ha sustituido por una escollera que impide el atraque al costado de la infraestructura.

La oposición al proyecto la lidera el Club de Vela de Castropol, la entidad que en su momento solicitó la ampliación de la rampa de dos a cinco metros de ancho para facilitar el acceso a la ría del Eo. Ahora su petición llegará al parlamento asturiano de la mano de Foro Asturias, que ayer se comprometió a presentar una iniciativa parlamentaria de cara a conocer si existe alguna irregularidad en la actuación.

El Principado sigue manteniendo que «por condiciones geotécnicas» se ha visto obligado a modificar el planteamiento inicial. Desde la administración consideran que la escollera es la opción que mejor se adecúa al terreno e indican que «al tratarse de un mismo tipo de obra no es necesario hacer una tramitación nueva».

El portavoz municipal de Foro Asturias, Jaime Pérez Magdalena, mostró ayer la obra al diputado Juan Ramón Campo y a los compañeros de partido Francisco Rivas y Carolina Morilla. Campo precisó que el objetivo de su visita es «verificar la ejecución de las obras de la rampa ante las quejas vecinales, ya que presuntamente la ejecución no se ajusta a la resolución de noviembre de 2010 de la Consejería».

Según el diputado forista, la escollera ejecutada «no presenta una apariencia lo suficientemente sólida», lo que le permite constatar la existencia de «indicios de una falta de cimentación adecuada». Considera Campo que el Principado debería escuchar las quejas de los usuarios y subsanar los «defectos de forma» que presenta la obra: «El fin último es que se adecúe a las solicitudes ciudadanas y que ejerza una funcionalidad que sea la adecuada, que permita el atraque y abrigo de los barcos lateral que ahora no es posible debido a la ejecución de una escollera y creemos que deben subsanarse esos defectos de forma».

Campo se mostró cauto antes de denunciar irregularidades en la ejecución de la obra y espera la respuesta de la administración en sede parlamentaria antes de dar un paso más: «Queremos verificar que se cumplen los criterios de calidad y la adecuación al proyecto, que según denuncian los colectivos no parece ser la correcta».

La obra, en la que se ha invertido un montante de 94.989,11 euros, está prácticamente ultimada.