Boal, A. M. SERRANO

La Asociación de Madres y Padres de Alumnos (AMPA) del colegio público Carlos Bousoño solicitará una reunión con la consejera de Educación, Ana González, para evitar que el Principado reduzca las unidades de Infantil y del ciclo superior de Educación Secundaria Obligatoria (ESO). La asociación recibió ayer la confirmación de que el Principado dejará en una las unidades de Infantil y en dos las de ESO (segundo ciclo). Según el gobierno regional, se cumple la ratio (número mínimo para formar grupo) para que esta previsión sea firme.

Los padres, disconformes con la fórmula, han alegado a esta previsión. Indican que se deben tener en cuenta las características de un concejo de alta montaña y sostienen que reducir unidades afectará a la calidad de la enseñanza porque, en definitiva, habrá menos profesores para un mayor número de alumnos.

El colegio de Boal ya luchó otros años por mantener las unidades de otros ciclos y del Bachillerato. Hasta ahora, el Gobierno regional cedió en sus planteamientos ante las alegaciones de los padres y del centro escolar. Los motivos que formulaban los padres se consideraban «de peso». «La amenaza siempre es la misma y nuestros argumentos también. Somos un caso particular porque somos un colegio rural», explica la portavoz de los padres, Irma García.

Las familias de los alumnos tienen previsto planificar un calendario de movilizaciones en caso de que el Principado no atienda sus alegaciones y no ceda a su petición. Antes, la AMPA solicitará la reunión con la Consejera para que conozca de primera mano su propuesta.

Las familias agotarán la vía del diálogo antes de convocar nuevas protestas en la calle. Pretenden movilizar al gobierno local, a la población de Boal y, en general, a toda la comarca porque entienden que se lucha por la escuela rural en general.

El Principado, por su parte, se ampara en la legalidad de las ratios, claves para formar unidades. El gobierno hace una estimación de matrículas a principios de año y esa información sirve para confeccionar las unidades por nivel y por curso.

La Consejería de Educación prevé para este centro 11 matrículas en Infantil, 47 en Primaria, 37 en Educación Secundaria Obligatoria (ESO) y 14 en Bachillerato. Los padres aseguran que, al margen de las ratios, la ley también ampara el apoyo a los centros rurales por sus características singulares.