El Ayuntamiento de Castropol acaba de afrontar una reordenación del puerto de la villa, para permitir el disfrute de la zona en condiciones de seguridad por parte de vecinos y visitantes. Por un lado se ha establecido un sentido único de circulación con carácter permanente y por otro se ha creado un carril peatonal para permitir el paseo seguro por la zona marítima. La actuación, que ha sido desarrollada por la Dirección General de Puertos a petición del Consistorio, ha incluido la delimitación de nuevas áreas de aparcamiento.

La ordenación afecta al trayecto comprendido entre el conocido como muelle de la Punta y la depuradora; no obstante el regidor, José Ángel Pérez, no descarta que se pueda ampliar hasta la zona donde se ubica el cuartel de la Guardia Civil. En este sentido Pérez deja claro que se trata de «un apaño» a la espera de que se ejecute el más ambicioso «Acondicionamiento peatonal en el entorno de la Mirandilla». Este es un proyecto que tramita Costas desde hace años y que permitirá adecentar todo el borde marítimo de la villa con un paseo de 1.150 metros construido con pasarelas de madera entre la playa de La Fuente y la depuradora.

El Alcalde castropolense explica que la actual actuación ha sido muy económica pues ha consistido en pintar y reordenar el tráfico. El sentido único de circulación (que antes se establecía durante la temporada estival) obliga a acceder al muelle por la zona del cuartel y salir por la depuradora, en cuyo entorno se han dispuesto varios aparcamientos en batería. En todo el trayecto se ha delimitado con una línea amarilla un carril peatonal, en la margen derecha, justo pegado a la ría del Eo.

El Ayuntamiento espera completar la actuación habilitando un aparcamiento con alrededor de 25 plazas en el entorno del cuartel, en una finca de propiedad municipal. Además dispondrán otro pequeño espacio para aparcar en la carretera que sube hacia el cementerio. En total se crearán unas cuarenta nuevas plazas.

Este trabajo de reordenación del tráfico y disposición de nuevas zonas de aparcamiento se va a extender a la zona del casco histórico. El objetivo final es que el peatón gane espacio en la villa y, sin dificultar la vida de los locales, propiciar la progresiva desaparición de los aparcamientos en plena calle. «Gracias a una cesión hemos dispuesto un aparcamiento en la zona de atrás del casino para 60 plazas y el objetivo final es dar un vuelco a la circulación en el casco urbano, que la calle pueda estar a disposición de los peatones», añade el regidor. En este sentido el equipo de gobierno estudiará las posibilidades con la Policía Local.