Medio centenar de trabajadores de Benito Sistemas de Carpintería permanecen desde las 23:00 horas de anoche encerrados en las instalaciones de la firma en Navia.

Los trabajadores mantendrán esta medida de presión de manera "indefinida" para reclamar el pago de las mensualidades que se les adeudan (siete en total) y para rechazar la posibilidad de la aplicación de un Expediente de Regulación de Empleo (ERE).

El portavoz del Comité de Empresa, Daniel Rodríguez Maribona, ha explicado que la familia Zabala, propietaria del 75 por ciento la empresa, ha planteado como única alternativa la liquidación de la empresa.

La plantilla también protesta por el rechazo de los propietarios a una oferta realizada por un inversor, según ha podido conocer el Comité. El portavoz ha advertido de que los trabajadores "no pueden poner más de su parte", puesto que "han trabajado siete meses sin cobrar" y la empresa todavía adeuda una media de 10.000 euros a cada empleado.

Directivos y plantilla de Benito Sistemas, aún sin acuerdo, apuran la negociación

La propiedad de Benito Sistemas de Carpintería y el comité de empresa, órgano de representación oficial de los trabajadores, agotan el diálogo. Ambas partes permanecían reunidas al cierre de este edición sin llegar a un acuerdo que evite que los trabajadores se pongan en huelga los próximos lunes, miércoles y viernes. El conflicto sigue sin solucionarse. La empresa, participada en un 72 por ciento por la familia Zabala (propietaria de la empresa Ibérica de Revestimentos, Ibersa, con sede en Sariego) y la familia Benito (fundadores de la firma en la década de los cincuenta) no tiene liquidez. Adeuda casi siete nóminas a los 81 trabajadores, que ya han organizado varias protestas para reclamar su salario y para rechazar un hipotético Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que la firma podría estar estudiando y que afectaría al cincuenta por ciento de la plantilla.

La reunión de ayer, prevista a las cinco de la tarde, se celebró en el Servicio Asturiano de Solución Extrajudicial de Conflictos (SASEC). Parte de los trabajadores se niegan a presentarse en la sedede Ibérica de Revestimientos y dicen sentirse «amenazados» por la familia que desde junio de 2012 tiene la mayor parte de la empresa. El comité de empresa aseguró el pasado miércoles que radicalizaría las protestas en caso de no llegar a un acuerdo en la reunión de ayer.

Benito Sistemas de Carpintería solicitó al juzgado de mercantil un concurso de acreedores el pasado junio. Los pagos dependen del dictamen de un administrador concursal. La empresa propuso la semana pasada a los trabajadores acabar los pedidos en curso. Según la compañía, ésta sería una garantía para cobrar la deuda. Pero los trabajadores aseguran que, a estas alturas, «no tenemos garantías de nada».

El Principado, a través del Consejero de Industria, Graciano Torre, se ha comprometido a mediar en el conflicto. Según fuentes cercanas, estaría buscando un nuevo inversor para reflotar la firma. El pasado lunes, una persona del Occidente y con experiencia en el sector se puso en contacto oficialmente con la empresa con el objetivo, según el gerente de la firma, Eduardo Noriega, de hacerse con parte de la propiedad. De momento, no hay nada firme y ni trabajadores ni propiedad actual confirman un acuerdo. La plantilla se concentra todos los días de huelga en la entrada de la nave.