El jefe de la comisaría de la Policía Nacional de Luarca, Ignacio González-Cachón, manifestó ayer su preocupación por el consumo "descontrolado" de alcohol entre los jóvenes y también de drogas calificadas como de alto riesgo o duras. Lo hizo en el discurso de los actos conmemorativos de la festividad de los Santos Ángeles Custodios, patronos de este cuerpo de seguridad. González-Cachón pidió más colaboración de las familias, de los centros educativos y de otras instituciones para atajar el que considera "un problema importante y que está ahí".

Este año, la mayor parte de las actas en materia de sustancias estupefacientes en Luarca están relacionadas con drogas duras, según indicó el jefe de la comisaría de Luarca. "Es decir, nos estamos enfrentando a un perfil de consumidor muy agresivo y fuera de sí", indicó. En cuanto al consumo de alcohol, apeló a la sensibilidad del consumidor y en caso de ser menor de edad, del entorno, por ser "una droga socialmente aceptada". "Muchos jóvenes estarán destinados al fracaso social, laboral y familiar al iniciarse en el consumo de algo para lo que no están preparados", indicó. González-Cachón añadió que su intención no es ser alarmista, pero "no debemos bajar la guardia". Y añadió: "No podemos olvidar las consecuencias de los fatídicos años ochenta".

A la responsabilidad de los padres y de las administraciones públicas sumó la de los centros educativos. "Tienen la obligación de levantar la voz de alarma y poner en conocimiento de los padres cuantas observaciones sean capaces de percibir", dijo para añadir que "es obvio que muchos tutores son incapaces de asumir determinadas tareas en la educación de sus hijos".

En su discurso pidió la colaboración ciudadana para hacer frente a este y otros problemas. El jefe de la comisaría de Luarca se manifestó un seguidor del lema "llama, no molestas". "Los contactos ciudadanos nos permiten gozar de una información privilegiada y susceptible de hacerla operativa", detalló. La comisaría de Luarca es la más pequeña de Asturias, con 50 agentes. Se puso en marcha por razones operativas y para facilitar la renovación del documento nacional de identidad en la comarca.

Su campo de trabajo se reduce al entorno urbano y en su caso a asuntos relacionados con malos tratos o trata de blancas en toda la comarca, una competencia que el cuerpo tiene asignada por ley. Ignacio González-Cachón llegó a la comisaría en 2011. Desde entonces una de sus principales preocupaciones ha sido a erradicar el consumo de drogas en la villa, donde apenas hay delincuencia.

En su discurso agradeció la colaboración del resto de cuerpos de seguridad operativos en la zona, es decir, la Guardia Civil y la Policía Local; y también del alcalde, Simón Guardado (PSOE) y su equipo de trabajo. De cara al próximo año, la comisaría tratará de tender más puentes con los centros educativos. Hasta la fecha se han celebrado jornadas relacionadas con el acoso escolar o los riesgos informáticos. En 2015, avanzó, "trataré de renovar programas dedicados a las drogas para intentar llegar por todos los medios a los jóvenes".