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El avance de una nueva especie invasora

Descubren en Añides (Castropol) el primer nido de avispón asiático en Asturias

"En 500 metros alrededor van a aparecer más panales en primavera", sostiene la presidenta de la Asociación de Abeyeiros del Occidente

Descubren en Añides (Castropol) el primer nido de avispón asiático en Asturias

La "Vespa velutina", el avispón asiático que mata abejas y arrasa colmenares, ya tiene casa en la comarca occidental. Después de que este verano se descubrieran los primeros ejemplares de esta especie invasora en el concejo de San Tirso de Abres, hace unos días se ha confirmado la localización del primer nido en Asturias, concretamente en el pueblo castropolense de Añides, en un punto muy cercano a las casas.

Así lo explica la presidenta de la Asociación de Abeyeiros del Occidente de Asturias (Abeyoas), Andrea González, quien dio aviso al 112 después de recibir la llamada de Servando Prieto, que localizó en un castaño próximo a su casa lo que parecía un nido de avispón asiático. Los técnicos de la Consejería de Agroganadería ya han visitado la zona para constatar que se trata de un nido de "Vespa velutina" y no de avispón del país, que suele dar lugar a falsas alarmas, y en los próximos días acudirán de nuevo para inyectarle un insecticida.

González explica que se trata de una noticia esperada, pues en los últimos meses se han localizado avispones aislados por diferentes concejos de la comarca, como Illano, Vegadeo y Taramundi. La parte positiva de este hallazgo, precisa la apicultora, es que ofrece información con vistas a la erradicación de los panales. "Es un indicador bastante importante porque nos permite saber que en primavera, en 500 metros alrededor, va a haber más", precisa.

En este momento los nidos están prácticamente vacíos, ya que los avispones, a excepción de las reinas fecundadas, se mueren en invierno. La población se recuperará en primavera, momento en el que habrá que extremar los controles en el entorno de Añides para evitar la proliferación de estas moradas de avispas asiáticas. "La presencia del nido es ya un indicador claro de que está aquí y, además, de que no sólo está en la costa. Es información para trabajar", añade González.

La presidenta de Abeyoas asegura que este es un momento idóneo para estar pendientes, ya que, con la caída de la hoja, es posible que se localicen más nidos, de ahí que pida la colaboración vecinal. "Hay que vigilar y, si vemos algo, llamar a la Guardería o al 112".

Prieto y su mujer, Guadalupe López, localizaron el nido en cuestión la semana pasada, en un punto a escasos 200 metros de viviendas. Pasaban por un camino contiguo al castaño y López se fijó en un objeto extraño que colgaba de una de las ramas, en la parte más alta del árbol. "Primero pensé que era un saco que había quedado enganchado por el viento; era bastante grande y tenía el color de un saco", precisa la mujer. No obstante, en cuanto Prieto paró el coche se dio cuenta de que era un nido de "velutina" pues había aprendido a identificarlos en un curso realizado meses atrás y promovido por la empresa Tu Colmena. "El que sabe cómo son los reconoce bien", explica.

El matrimonio, que tiene unas catorce colmenas en Añides, ya estaba preocupado por el avispón asiático desde hacía meses. En septiembre, cuando recogieron la miel, detectaron muchos ejemplares y eso les hizo intuir que debía haber un nido cerca. "Matamos muchos y capturamos alguno vivo, que se llevaron los guardas de la Consejería", aclara López. Después, con la recogida de fruta volvieron a localizar más avispones, que les picaron varias veces.

Andrea González explica que en temporada de cría los avispones comen abejas, pues necesitan proteína, pero ahora se alimentan de hidratos de carbono, de ahí que sea fácil verlos en la fruta.

Uno de los guardas desplazados a Añides la semana pasada constató que el nido aún tenía ejemplares en su interior. "Estuvo con un telescopio y dijo que veía avispones entrar y salir", explica el matrimonio.

A finales de julio, tras varias falsas alarmas, se confirmó la presencia de los primeros ejemplares de "Vespa velutina" en Asturias, concretamente en el concejo de San Tirso de Abres. La entrada en Asturias por el occidente parecía lógica, pues en la mariña lucense llevan meses combatiendo esta especie. Abeyoas recogió los ejemplares y pidió la intervención de Agroganadería para establecer un plan coordinado para frenar la entrada de la especie en la región.

Agroganadería dio a conocer en septiembre el plan de control del avispón asiático a través de dos fases: una primera de alerta, centrada en la detección de ejemplares mediante la vigilancia pasiva y la colocación de trampas, y una segunda de intervención para retirar y eliminar nidos.

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