La estela de Nicer regresará muy pronto a Vegadeo. Al menos una réplica de esta pieza funeraria de gran valor que fue hallada en el municipio veigueño en 1932 y que hoy se exhibe en el Museo Arqueológico de Asturias, en Oviedo. Patrimonio, a petición de la Asociación Amigos de Vegadeo y su concejo, ha dado luz verde a la creación de una réplica de esta singular pieza que permita su exhibición permanente en Vegadeo.
El presidente del colectivo, Juan José Pardo, planteó el pasado julio a la consejera de Cultura saliente, Ana González, la posibilidad de que esta pieza regresara a Vegadeo, donde podría constituir un aliciente turístico de gran importancia. El equipo de Cultura valoró la propuesta de Pardo, aunque finalmente optó por la creación de una réplica del original.
La propuesta recibió el visto bueno formal el pasado 10 de agosto en la reunión de la Permanente del Consejo del Patrimonio Cultural de Asturias. En el encuentro se informó de manera favorable la solicitud de esta pieza para "su exposición permanente en la sala de exposiciones de la Casa de Cultura", como se expone en la notificación oficial, que firma la jefa de la sección de Conservación y Restauración, María Milagrosa Hernández, y que llegó el pasado 2 de septiembre al Ayuntamiento veigueño.
El presidente de la Asociación Amigos de Vegadeo y su concejo muestra su satisfacción por la noticia. "Es una pieza muy antigua y cuando fue localizada supuso un hito en la arqueología asturiana", precisa Pardo, quien confía en que la réplica pueda estar lista para el próximo verano cuando el colectivo organiza sus ya tradicionales Jornadas de Historia.
Pardo explica que el colectivo trabajará ahora para tratar de que Cultura autorice también el envío temporal de la pieza original para que sea expuesta junto a la réplica a la que, añade, deberá buscarse "un sitio preferente" para su exposición. El presidente del colectivo destaca la importancia de la autorización de Cultura pues permitirá que mucha gente conozca este elemento arqueológico de gran valor: "Habrá muy poca gente que la haya visto en persona y es una oportunidad de que lo hagan".
La estela fue localizada en 1932 por el castropolense Arturo Barcia García, que entonces sumaba 12 años. La halló en una finca propiedad de Venancio Pérez que se ubicaba en el lugar veigueño de A Corredoira. Se trata de una piedra cuarcita que hace referencia a Nicer Clutosi, príncipe de los albiones, uno de los primeros pueblos que poblaron las riberas del Eo.
Existen algunas dudas sobre la fecha exacta de la pieza como recoge el propio Juan José Pardo en un artículo publicado en la revista local La Vega. No en vano, hay fuentes que la datan en el siglo I después de Cristo, pero otras, basadas en el símbolo que figura en la parte alta de la piedra, consideran que no puede ser previo al siglo IV. En la lápida se puede leer en latín la siguiente inscripción: "Aquí yace Nicer, hijo de Clutosus, del castro Cariaca, Príncipe de los albiones, de setenta y cinco años".
