En Vegadeo se buscan móviles. O, al menos, eso hace el equipo de gobierno socialista, que lleva semanas tratando de que los ediles del PP devuelvan todos los terminales que, según el contrato telefónico, fueron usados durante su mandato. Ahora el asunto llegará a manos de la justicia, pues el pleno aprobó anteayer ir a juicio contra los populares.
El gobierno local explica que los concejales Manuel Álvarez, Jesús Soto y Marcelino Seijo devolvieron sus terminales, pero siguen pendientes los de Mónica Castillo -actual portavoz del grupo popular- y la exalcaldesa Begoña Calleja, quien sí devolvió un terminal, pero no el que tenía asignado en el contrato. Además de estos dos móviles, hay otros cinco que no aparecen. Se trata de teléfonos de alta gama, especialmente dos de ellos, con un precio de mercado superior a 400 euros.
El alcalde de Vegadeo, César Álvarez "Mourelle", quiere que se aclare de una vez por todas esta situación, pues, aunque el Ayuntamiento ha dado de baja las líneas, "sigue pagando por los teléfonos". Precisa el regidor que se trata de "dinero público, por lo que hay que exigir una responsabilidad política a quien debía ocuparse de controlar estos bienes". El regidor señala a la exalcaldesa Begoña Calleja, dado que es ella quien firma el contrato telefónico del consistorio.
El gobierno veigueño también ha detectado algunas irregularidades, como el hecho de que había trabajadores municipales que tenían terminales asignados que nunca llegaron a poseer. "No sabemos qué fue de ellos, lo que está claro es que, haciendo caso a la lista, faltan teléfonos, y como el PP no nos da explicaciones, vamos a reclamarlas por la vía judicial", añade el teniente de alcalde, Abel Pérez.
Este periódico trató ayer, sin éxito, de contactar con la portavoz popular, Mónica Castillo, para recabar su versión. Quien sí quiso hablar fue la exalcaldesa Begoña Calleja, que aclaró que sí devolvió su móvil en el último día de mandato: "Ya se lo aclaré al Alcalde en su momento, por tanto, entiendo que hay mala fe por su parte. Si quiere llegar al juzgado, así lo explicaré". Calleja considera este asunto "vergonzoso" y acusa a los socialistas de usar "bobadas que son falsas" para difamarles en lugar de trabajar.
En el pleno también se aprobó una factura pendiente de pago de la época del gobierno popular. Corresponde a una obra de bacheo que tenía un reparo de Secretaría por exceder el 77% del presupuesto inicialmente aprobado. El pago se aprobó con los votos del PP; el PSOE se abstuvo.
