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Massachusetts cala en Tineo

Dieciocho estudiantes y dos profesores del instituto tinetense viajan hoy a Estados Unidos para profundizar en un intercambio que se inició hace dos años

Los alumnos tinetenses participantes en el intercambio con sus profesores Chema González (abajo a la izquierda) y Montse Fernández (abajo a la derecha), ayer, a la entrada del instituto, ante el mural del viaje que prepararon en el curso anterior. D. ÁLVAREZ

Dieciocho alumnos del instituto de Tineo acompañados por los profesores de inglés del centro, Montse Fernández y Chema González, se suben hoy a un avión que los trasladará al estado de Massachusetts, Estados Unidos, para pasar allí dos semanas dentro del programa de intercambio que organiza el centro con el instituto Lincoln-Subdury, en la localidad homónima, próxima a la ciudad de Boston.

Este es el segundo intercambio que realiza el instituto tinetense. El primero fue en 2013 y en él participaron 13 alumnos que se alojaron con familias en las que había jóvenes de su misma edad. En la primavera del 2014 le tocó a Tineo ser el receptor de estudiantes de Lincoln-Subdury. Ahora se inicia de nuevo el proceso de intercambio con el viaje de los alumnos tinetenses a la localidad de Massachusetts.

Los 18 estudiantes compartirán las próximas dos semanas con familias estadounidenses, convivirán con estudiantes de su misma edad y asistirán con ellos a clase. Además, tendrán tiempo para viajar y conocer la zona. "Queremos enseñarles lo máximo posible del lugar al que vamos, muy importante en la historia de Estados Unidos, por ello también visitarán localidades como Salem, Plymouth y estaremos tres días en Nueva York", explica Montse Fernández.

Los alumnos que participan, de cuarto de educación secundaria y primero de bachillerato, llevan todo el curso anterior preparándose para el viaje y estaban ansiosos de que llegase el momento de coger el avión. Manuel García es uno de los estudiantes que repiten experiencia. "Me lo pasé muy bien, aprendí mucho inglés y conocí mucha gente que tengo ganas de volver a ver", asegura. Su compañera Malena Monteserín no viajó a Estados Unidos, pero acogió en su casa a una estudiante de intercambio. "Conectamos muy bien y me demostró que puedes tener amigos a miles de kilómetros", comenta. Ahora es a ella a la que le toca realizar el viaje y, además de mejorar el inglés y conocer nuevos sitios y culturas, está entusiasmada con poder reencontrarse con su amiga.

Después de la primera experiencia vivida, los profesores han podido ver los resultados del intercambio. "Ganan en fluidez porque se ven obligados a soltarse a hablar y ven el idioma como una herramienta de comunicación, además del crecimiento personal que supone para ellos estar solos en una nueva familia y cultura", subraya Chema González.

El objetivo a largo plazo de este programa de intercambio es lograr crear un lazo de unión entre las dos localidades. Algo que ya se está dando en la actualidad, puesto que este verano algunos de los estudiantes estadounidenses han vuelto a Tineo de vacaciones y "un exalumno del instituto que participó en el intercambio está actualmente estudiando en Estados Unidos", añade Montse Fernández.

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