El sindicato UGT celebró ayer en Castropol la 18.ª edición del encuentro anual en la comarca occidental con el lema "El Occidente también existe" y muchas críticas. El secretario general en Asturias, Justo Rodríguez Braga, acudió con un mensaje de unidad. El sindicalista criticó la acción de "sindicatos minoritarios de gremios minoritarios" y dijo que en estos tiempos es importante "tener un discurso transversal para todos".

UGT ha perdido afiliados durante la crisis. De 50.000 ha pasado a tener 40.000, "una cifra que no es tan mala si tenemos en cuenta el contexto económico y el paro", dijo Braga. Sin ir más lejos, la central no convocó ayer al mismo número de personas que lograba reunir en el mismo encuentro años atrás. El acto, con todo, fue seguido por más de un centenar de personas que escucharon las críticas de Justo Rodríguez Braga al presidente del Federación Asturiana de Empresarios (FADE) "por decir que Asturias no necesita más infraestructuras para progresar"; y a los gobiernos que permiten que un joven no pueda estudiar "porque sus padres no ganan juntos más de 1.300 euros al mes" o dejan que en la sanidad pública "exista lista de espera porque los sanitarios no quieran trabajar por la tarde".

"Todos somos los accionistas de la sanidad y de la educación", dijo en un intento de implicar a la gente en la lucha de los sindicatos mayoritarios por velar por los servicios públicos de calidad.

Al acto acudió la consejera de Infraestructuras, Belén Fernández, quien criticó las políticas del gobierno del PP de Mariano Rajoy en un discurso de precampaña electoral. "Tenemos que revelarnos contra esta realidad que vive Asturias", dijo en alusión a la falta de compromiso del ejecutivo central con la variante de Pajares, la mejora de las comunicaciones ferroviarias en la región o la autovía del Suroccidente.

Ambos, Braga y Fernández, destacaron la importancia de tener presupuestos regionales para el próximo ejercicio y de avanzar con diálogo y a través de la concertación social.