La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Nieres se mantiene colaborando

La parroquia, especialmente ganadera, cuenta con una cooperativa de quince socios y todas sus casas están habitadas

Nieres se mantiene colaborando

Los sábados por la mañana y los miércoles por la noche, la escuela de Nieres abre sus puertas, y no para que se imparta clase, sino para vender los productos ganaderos y de alimentación que adquiere la cooperativa creada hace años por los vecinos de la parroquia y que aún conservan 15 familias.

A pequeña escala, esta cooperativa funciona con el trabajo de los propios socios que se implican en toda la logística de compra de material, descarga, colocación y venta para conseguir unos precios ajustados al coste. "Se marca una ganancia mínima para los gastos de la cooperativa y así los productos nos salen más rentables, y además lo tenemos en el propio pueblo y no hay que desplazarse", argumenta la vecina Rosa Rojo.

Los días de apertura de puertas de la cooperativa también se convierten en momentos de reunión vecinal y de encuentro entre ganaderos que de otra forma apenas logran verse por las calles de su localidad. "Aunque es un trabajo más llevadero que el de antes, ahora se ha triplicado y apenas hay tiempo para nada más", comenta Mari Carmen González, que asegura que es difícil encontrarse con los vecinos por el pueblo como ocurría antaño.

Especialmente ganadera, la parroquia de Nieres sorprende porque en sus pueblos ninguna casa está deshabitada. En concreto, Nieres tiene ocho casas y ninguna de ellas tiene sus puertas cerradas. "En unos años la zona cambió mucho, aumentó en cuanto a inversiones ganaderas y casas, pero va a volver a cambiar otra vez y para peor porque no hay relevo generacional", comenta Encarnación Díaz, que lamenta que los pueblos estén sentenciados "cuando hemos trabajado tanto en ellos".

Mari Carmen González asegura que ahora mismo "tal y como están las cosas en la ganadería es poco apetecible quedarse y a la vuelta de unos años quedarán muy pocas ganaderías porque la mayoría están a punto de jubilarse". Algo que también ve con pena Rosa Rojo porque "aquí todo el mundo tiene buenas ganaderías, numerosas y con buenas instalaciones, y una vez que se cierren es casi imposible que vuelva a resurgir". Con dos hijos adolescentes, José Luis Nido no sabe si tendrá relevo generacional, pero tiene claro que "no les voy a animar, ni a quitar la idea de la cabeza, por ahora tienen que estudiar y hasta que tomen una decisión mantendremos la ganadería".

Con una de las mejoras con las que contará Nieres para sus ganaderías próximamente es con la nueva red de abastecimiento de agua que está llevando a cabo la consejería de Infraestructuras para toda la parroquia. Nieres es un pueblo con poco agua, "un problema para dar de beber a todo el ganado", comentan los vecinos, que esperan contar pronto con el nuevo abastecimiento al que se destina una inversión de 1.506.809 euros.

Entre las quejas que tienen los vecinos está el estado de los caminos, que comienzan a presentar signos de deterioro "y hace tiempo que los tenemos prometidos pero nadie se acuerda", reclaman.

Compartir el artículo

stats