La Guardia Civil ha detenido a cinco rumanos afincados en Lugo acusados de 23 delitos contra el patrimonio por robos continuados en la zona comprendida entre Vegadeo y Valdés. La investigación de los hechos comenzó en enero y corrió a cargo del Equipo de Investigación de Compañía (EICO) de la Guardia Civil de Luarca, con sede en Navia. Los agentes detuvieron a los sospechosos la semana pasada en Tapia y los pusieron a disposición del Juzgado de Castropol, que instruye el caso.

A los hombres, con edades comprendidas entre los 22 y los 43 años, se les han imputado varios delitos contra la propiedad, por robo continuado. La Guardia Civil estima que el valor total del material sustraído -mayoritariamente artículos metálicos, aunque también robaron maquinaria y herramientas de trabajo- ronda los 46.000 euros. La mayor parte de los incidentes se registraron en naves, casetas de obra y anexos a viviendas. Uno de los robos más importantes se produjo en una nave vinculada al servicio municipal de agua, ubicada en la localidad castropolense de Barres. Allí entraron en dos ocasiones, y en una de ellas se llevaron piezas de bronce y cobre por valor de 10.000 euros.

El EICO inició la investigación a principios de año tras percatarse de la existencia de varias denuncias en diferentes puestos de la Guardia Civil por robos de características similares que se perpetraban en localidades pequeñas del noroccidente. "Como resultado del pormenorizado estudio de la actividad delicitiva se puede constatar que los hechos responden a un único y característico modus operandi", precisa la Benemérita en un comunicado.

El método de trabajo usado por los delincuentes era desplazarse a primera hora de la mañana a pequeñas localidades para seleccionar los objetivos idóneos para el robo y, según precisa la Guardia Civil, "amparándose en el hecho de que se dedicaban a la compra-venta de chatarra". Después cargaban el material en un furgón y se daban a la fuga con rapidez. Transportaban los artículos por carretera hasta diferentes chatarrerías de las provincias de Lugo y de La Coruña donde los vendían. Asimismo, una parte de los materiales robados era enviada a Rumanía, su país de origen, por medio de una empresa de transporte.

Una de las pistas más determinantes de la investigación fue la descripción de una furgoneta de color blanco que muchas víctimas vieron en las horas previas al robo, en algunos casos ofreciendo datos concretos que ayudaron a la investigación. En total, los hombres utilizaban tres furgones de gran tamaño que les permitían el traslado "con facilidad" de los artículos sustraídos.

La "exhaustiva investigación" desarrollada por el equipo de investigación naviego permitió determinar las identidades de los presuntos autores, que tienen residencia habitual en la ciudad gallega de Lugo. "Después de varios meses de investigación y de gestiones, en los que se mantuvo informada a la Autoridad Judicial en todo momento, se llegaron a conocer las identidades de los supuestos autores", añade la Guardia Civil en el comunicado emitido ayer con el resultado de esta operación.

A finales de la semana pasada el equipo de investigación naviego localizó a los autores de esta veintena de robos registrados en el noroccidente mientras circulaban por carretera en las inmediaciones de Tapia y se procedió a su detención. Precisamente, en Tapia se registraron varios de los robos denunciados, en pequeñas localidades como La Roda y El Valle de San Agustín.