La operación desarrollada por la Guardia Civil que permitió desarticular una banda de cinco rumanos se une a la detención fortuita, el pasado sábado, de otros cuatro, a los que también se les han imputado varios delitos, cuando circulaban por carretera a la altura de Castropol. Todos ellos se unen a una larga lista de ciudadanos de Rumanía que se dedican a actividades delictivas en el norte peninsular.

La detención del sábado corrió a cargo de agentes de la Guardia Civil de Tráfico de Luarca que estaban realizando un control rutinario de alcohol y drogas cuando pararon una furgoneta sospechosa. En ella viajaban los cuatro hombres detenidos como supuestos autores de varios robos en la zona de La Coruña.

En el momento de la detención, los individuos llevaban en la furgoneta diversos artículos robados en naves industriales, y también herramientas y utensilios con los que supuestamente se llevaron a cabo los robos. La detención se produjo a las 07,15 horas del sábado en el kilómetro 6 de la nacional 640, a la altura del municipio de Castropol.

Otra operación similar a la que lideró el Equipo de Investigac ión de Compañía (EICO) de la Guardia Civil de Luarca se desarrolló en Oviedo en 2011. Fue bautizada como operación "Guadiana" y permitió detener a cuatro personas naturales de Rumanía como presuntos autores de quince robos en el centro de Asturias. Más recientes fueron la bautizada como operación "Pesetu", que en 2012 permitió detener a 12 rumanos por asaltos a viviendas y chalés de Asturias y de otros puntos de España, y la operación denominada "Pálida", que el pasado mayo permitió a la Guardia Civil desmantelar una organización dedicada al robo de cable de cobre. Se calcula que causó pérdidas económicas por valor de cuatro millones de euros entre Asturias y Cantabria.