Jueves tras jueves, llueva o haga sol, los naviegos saben que en el puesto que instala El Cabillón en el mercado podrán encontrar el mejor producto. Acelgas y lechugas frescas, recogidas esa misma mañana; rojos tomates; sabrosas manzanas... La oferta varía según la temporada, pero la demanda es constante. Los clientes de la comarca son fieles a su cita con estos alimentos producidos de forma ecológica. Por eso este centro especial de empleo, promovido por la Fundación Edes, entregó ayer en la villa el reconocimiento "Compromiso Verde" como forma de agradecimiento al apoyo prestado.

"El mercado de Navia es nuestro mejor cliente. Gracias a lo que vendemos aquí jueves tras jueves se consigue mantener un puesto de trabajo de una persona con discapacidad a media jornada, y la parte proporcional de la persona que necesita para darle los apoyos", explica Antonio García, administrador de Finca El Cabillón, quien asegura sentirse "muy satisfecho" por este apoyo.

"Desde el inicio, en 2066, apostamos de forma clara por estar a pie de calle, para dar a conocer el proyecto, acercando a los vecinos nuestros productos", relata García, que también considera importante que el público tenga presente el trabajo que hacen cada día las personas con necesidades especiales de apoyo. De paso, logran llevar al mercado productos "naturales, frescos y ecológicos", de gran calidad, y que, según diversos estudios, aportan hasta el cincuenta por ciento más de nutrientes que los productos procedentes de explotaciones convencionales.

Destaca, además, que este tipo de producciones crea más empleo que las mecanizadas, que se genera una estrecha relación entre el productor y la clientela, y que apoya productos del territorio, fuera de las grandes cadenas de distribución. En la finca tapiega se dio oportunidad de empleo a 18 personas durante la presente campaña.

El reconocimiento fue recogido por la concejal de Comercio, Rita Irusta, en representación de todos los clientes del mercado naviego. "Es una satisfacción que Navia sea un referente en el comercio de la comarca. Gracias al trabajo de la Fundación Edes se da la oportunidad de que estos jóvenes puedan llegar a tener un puesto de trabajo", reseña Irusta, que también destaca la labor de la Policía Local y del personal municipal que hacen posible la cita semanal.

De la calidad de los productos de El Cabillón dan buena cuenta cada jueves cientos de clientes. Una de ellas se lleva varios kilos de verdura a casa. Es Isabel Enríquez, que cuenta que "admira la iniciativa" y le "encanta" colaborar. "Además, la fruta y verdura naturales saben mejor", remata.