La encargada de realizar el transporte escolar en la ruta a Santa María del Puerto, en Somiedo, defiende que su vehículo reúne todas las condiciones necesarias para transitar con seguridad por la zona. Asegura que durante el invierno dota a su coche de ruedas de nieve que le permiten circular en condiciones adversas "sin haber tenido, en seis años que llevo realizando este transporte, ni una salida de la carretera".
La semana pasada el Ayuntamiento de Somiedo sacó a licitación provisional la ruta escolar que cubre los pueblos de la zona del Puerto en respuesta a la negativa de los padres a continuar enviando a sus hijos al colegio Álvaro Flórez Estrada de Pola de Somiedo en un vehículo que no sea un todoterreno, dada la situación de los pueblos, que se encuentran a más de 1.000 metros de altitud, lo que supone que la mitad del curso haya presencia de nieve.
La conductora asegura que no existe ninguna ley que obligue a realizar el transporte de alta montaña con un todoterreno y sostiene que adapta su vehículo para poder trabajar durante el invierno. Añade, además, que ella está subcontratada por una empresa de transporte "que si creyese que mi coche no es seguro para realizar el trabajo en invierno no me contrataría, igual que yo misma no arriesgaría la vida si el vehículo no cumpliese con todas las normas de seguridad".
Desde el inicio del curso, los escolares de esta ruta asisten a clase en coches particulares para reivindicar el traslado de los niños en un todoterreno.
