Valdés muestra dos nuevos calamares gigantes, capturados en Asturias y en Cantabria. Se encuentran en el Parque de la Vida de La Mata y podrán ser contemplados estas Navidades. La Coordinadora para el Estudio de las Especies Marinas (Cepesma) ha conservado ambos ejemplares tras concluir, sin sorpresas, las respectivas necropsias que se llevaron a cabo en la sede de la Cepesma, en Valdés.
La hembra de calamar gigante que recogió un arrastrero en el caladero de Codillo falleció precisamente por esa captura "accidental", indicó el presidente de la Cepesma, Luis Laria. Mide 12 metros y pesa 170 kilos. El otro calamar gigante que se muestra en La Mata, donado por el Instituto Español de Oceanografía santanderino, varó en la playa de Santander tras ser capturado por un barco de pesca. "Tenía dos tiburones de pequeño tamaño dentro del manto. No es su alimento natural, por ello entendemos que están ahí por algo accidental", indicó Laria. Este ejemplar, también una hembra, mide seis metros y pesa 80 kilos.
Al estar cerrado por tiempo indefinido el Museo del Calamar Gigante de Luarca, los dos grandes cefalópodos pasarán a formar parte de las colecciones que Luis Laria mantiene y muestra en el Parque de la Vida de La Mata. El fundador de la Cepesma costeó en solitario el material necesario para la conservación de los ejemplares, razón por la cual estos calamares son de su propiedad.
La inversión para conservar un calamar gigante con la finalidad de poder exhibirlo ronda los 7.000 euros. Se necesita comprar una vitrina con las dimensiones del ejemplar y gran cantidad de alcohol y otros materiales que garantizan su futuro en buen estado.
La colección de grandes cefalópodos que se mostraba en el museo luarqués está ahora diseminada por otros lugares. Parte de ellos se encuentran en el Parque de la Vida, mientras que otros están alojados en el Musée de la Mer de Biarritz, en Francia.
