La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

La planta de mejillones de Valdés tienta a los pescadores ofreciéndoles 30 empleos

Las cofradías mantienen su oposición al proyecto, pese a la mediación del Principado, y tratarán el asunto en la próxima reunión de la Federación

La empresa que proyecta una planta de cultivo de mejillones en la costa de Valdés aspira a crear una treintena de puestos de trabajo. Los promotores se reunieron anteayer por la tarde con una representación de pescadores de Asturias y el director general de Pesca, Alberto Vizcaíno, con la intención de ofrecer más información sobre un proyecto que, de momento, no tiene el beneplácito del sector pesquero.

En ese encuentro, el empresario Pablo Álvarez se comprometió a ofrecer estos puestos de trabajo a pescadores o familiares directos. Es una de las estrategias de la empresa para poder tener el apoyo de un sector que ha mostrado reiteradamente su oposición al proyecto pese a la mediación de la Dirección General de Pesca, que promovió la reunión del pasado martes.

El patrón mayor de la cofradía de pescadores de Luarca, Manuel Jesús Iglesias, aseguró ayer que de momento no hay acuerdo con la promotora. La empresa espera poder continuar con la tramitación de la planta (ahora pendiente de una resolución medioambiental), pero antes desea tener el apoyo del sector pesquero. Según indica su portavoz, tienen otras ofertas para desarrollar la planta y poder construir con el tiempo una conservera, "algo que desean muchos concejos", afirma.

Pese a que esta actividad tiene que ver con la pesca, en el sector aseguran que podría perjudicar los intereses de los barcos asturianos que faenan por la zona. En Luarca, Iglesias asegura que la mayor parte de los pescadores consultados no está de acuerdo con esta industria, "simplemente por el hecho de que reduce el espacio para pescar en una zona muy visitada", indica.

Pero las críticas no sólo se producen en el concejo donde tiene previsto instalarse la planta. El patrón mayor de la cofradía vecina de Puerto de Vega, Adolfo García, entiende que este proyecto, en caso de salir adelante, "crea un mal precedente". "No estamos de acuerdo con esta industria porque la planta de cultivo es muy extensa y en nada nos beneficia a los que ya estamos aquí trabajando", indica. García asegura ademas que la oposición al proyecto debe plantearse desde todas las cofradías asturianas, "porque toda la costa de Asturias está amenazada", apunta. A su juicio, la pesca tradicional "debe oponerse a estos proyectos relacionados con la acuicultura", tan presentes en la costas gallegas y vascas.

A falta de un acuerdo entre promotor y sector pesquero, los patrones solicitarán que el asunto se debata en la próxima reunión de la Federación de Cofradías de Asturias que, si no fallan las previsiones, se celebrará el día 11. "Creemos que debemos analizar bien esta situación y, en caso de ser necesario, diseñar una estrategia de defensa conjunta", explica García.

El proyecto, que ya superó el periodo de información pública, está pendiente de un estudio de impacto ambiental favorable. Según sus promotores la planta no tiene repercusiones importantes para el entorno.

Compartir el artículo

stats