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Roban de madrugada en cuatro casas de Oviñana, en dos con los ocupantes dentro

Los cacos se llevan un BMW tras coger las llaves en una vivienda, y dinero y relojes

Dos vecinos de Oviñana observan la ventana por donde entraron los ladrones. A. M. SERRANO

Oviñana es objetivo de los cacos. Un grupo de delincuentes asaltó ayer de madrugada cuatro viviendas, dos de ellas ubicadas en el centro del pueblo y habitadas en el momento de cometer el robo. Las otras dos se encuentran más alejadas, camino del faro de cabo Vidio, y están cerradas casi todo el año.

En uno de los casos, los ladrones perforaron un marco de la ventana para llegar al pasador y abrirla desde dentro. Accedieron sin hacer ruido a la vivienda y se pasearon por la casa en busca de objetos de valor mientras en una de las habitaciones dormía un matrimonio y en otra su hijo de diez años. Finalmente, se llevaron una colección de relojes que se encontraba en la habitación matrimonial, dinero en metálico y el coche, un vehículo marca BMW con diez años de antigüedad. Al parecer, pudieron abrir el turismo sin problemas al encontrar las llaves en una de las mesas de la casa. En la vivienda en la que dormía un matrimonio y sus dos hijos de seis y tres años accedieron al interior por una puerta trasera que lleva a una de las estancias de la casa. En este caso, se llevaron unos 500 euros y las llaves del coche. El turismo apareció en todo caso en el lugar donde su propietario lo había aparcado el día anterior. Se cree que los cacos no pudieron abrir el portón. Ambas familias han presentado una denuncia en la Guardia Civil.

Los propietarios de las viviendas que estaban habitantes en el momento de cometerse el robo prefieren mantener su anonimato, pero confiesan que el susto fue "tremendo". En una de la casas, la mujer se despertó a las cinco de la madrugada para tomar unas medicinas, pero no notó nada extraño. En la otra vivienda habitada tampoco se dieron cuenta de la presencia de los cacos. "Es algo que nunca esperas, sobre todo si estás durmiendo", sentencia una de las afectadas.

En el pueblo nadie notó nada raro la noche anterior. Un vecino sí vio a dos coches circular a gran velocidad sobre las cuatro de la madrugada, cuando llegó a su casa después de acabar el turno de trabajo. Se cree que eran los cacos con su vehículo y el turismo robado. Otro vecino asegura que vio el turismo robado circulando por la Autovía del Cantábrico en sentido Avilés.

Lo ocurrido centró ayer las conversaciones de los vecinos de Oviñana. El presidente de la asociación "San Roque", Víctor Suárez, mostró su indignación por los hechos. "Estamos asustados y muy preocupados porque entran en las casas cuando la gente está durmiendo. Nos preguntamos qué podría pasar si alguien, como un niño, se despierta", indicó. Suárez pidió más vigilancia policial para evitar que cunda el pánico.

Por la forma de acceder a las casas y la ausencia de pistas y de ruidos que pudieran delatarles, los vecinos creen que se trata de un grupo organizado o profesional. "Esperamos que las investigaciones den sus frutos lo antes posible", señaló Suárez. Los vecinos advirtieron ayer de la necesidad de transmitir a la Guardia Civil los movimientos de coches extraños que pudieran observar en el pueblo. En Oviñana hay censados 552 vecinos. El pueblo se encuentra cerca de la autovía, lo que facilita la salida del mismo.

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