Son un total de 27 las embarcaciones certificadas para comercializar el pulpo con la ecoetiqueta MSC: Puerto de Vega, Ortiguera, Viavélez y Tapia. Todas ellas pertenecen a la comarca del Navia-Porcía, cuyo grupo de acción costera facilitó la consecución de este distintivo. Sin embargo, la certificación está abierta a que otras cofradías del entorno puedan sumarse a ella, obteniendo de esta forma las ventajas que la acompañan.
"Hemos decidido que sea así, que se puedan unir a nosotros aquellos que lo deseen, para trabajar juntos en esto", explica Adolfo García, de Puerto de Vega. Eso sí, las cofradías deben pertenecer al plan de explotación de la especie. Por tanto, son Cudillero, Oviñana, Luarca y Figueras las que tienen opciones, si así lo desean, de certificar su pulpo.
El sello MSC garantiza que la pesquería del producto se desarrolla siguiendo unos estándares de respeto con el medio ambiente. Además de generar un mayor valor añadido a las capturas, indica al consumidor que el producto no ha dañado el entorno, algo que cada vez se tiene más en cuenta.
