El gobierno de Cudillero defiende el traslado de parte del programa de las fiestas de San Pedro a la explanada del muelle por razones económicas. La teniente de alcalde, Verónica Pardo, explica que serían necesarios "entre 15.000 y 20.000 euros" para organizar un programa con verbenas y orquestas, "un dinero que el Ayuntamiento, hoy por hoy, no tiene, por eso ha buscado soluciones. Pero si alguien tiene ese dinero, puede hacer las fiestas de San Pedro donde quiera", añade.

La solución del gobierno local pasa por ceder la organización a una empresa privada que, a cambio de explotar las barras, se hace cargo de las fiestas nocturnas y de las orquestas, y propone sacar las fiestas del centro del pueblo y llevarlas al puerto, donde hay más espacio. "Este gobierno buscó una comisión de fiestas, pero nadie quiso hacer nada y ahora que tenemos una propuesta llegan los problemas", indicó ayer Pardo.

Los hosteleros, especialmente los de la plaza de la Marina y sus alrededores, han mostrado su descontento con la propuesta. Por una parte, resta actividades al centro de pueblo, y también evita el gasto de turistas y visitantes en los bares en plenas fiestas; por otra parte, se rompe con una tradición pixueta. Ayer, el gobierno local se reunió con parte de los empresarios del sector en un encuentro meramente informativo.

De momento, el ejecutivo local no está dispuesto a ceder, según Pardo. "Tenemos un programa encima de la mesa y, a falta de una comisión de fiestas, es el que hay", señala. La teniente de alcalde subraya, además, que los actos más tradicionales se mantendrán en el centro de la villa. Se refiere al recital de l'Amuravela, el bautizo pixueto y la comida en la calle que se celebrará el día de San Pablín, gracias a la sardinada que se encargará de organizar la comisión de fiestas de Piñera. "Yo creo que no podemos decir que no habrá actividad en el centro".

Entre las voces discordantes, además de parte de los hosteleros, se encuentra el cronista oficial del concejo, Juan Luis Álvarez del Busto, quien ayer quiso dejar claro que alejar las verbenas "es romper con nuestras tradiciones".

Polémica con el comercio

El gobierno pixueto tiene otro frente abierto con el sector del comercio. Un grupo de comerciantes ha presentado por registro una queja por la instalación de puestos de artesanía en el paseo del puerto. La teniente de alcalde explicó que, en este caso, la competencia no es local, sino regional.

"El informe que hace el Ayuntamiento no es vinculante y no podemos decir que no si solicitan la instalación", subraya. Pardo recalca, además, que se trata de puestos de artesanos de Cudillero "que pagan aquí sus impuestos y, por tanto, también tienen derechos". En estos casos, el Ayuntamiento sólo puede limitar el número de expositores y vigilar la estética de los mismos.