Los viticultores y bodegueros de la Denominación de Origen Protegida del vino de Cangas conocieron ayer una nueva plataforma digital que permite monitorizar el viñedo para poder realizar un control detallado de su evolución y conocer los momentos óptimos para realizar las diferentes actuaciones sobre el terreno, como aplicar tratamientos preventivos contra las enfermedades que puedan afectarle.

"Cultiva decisiones" es el nombre de la plataforma que desarrolla la empresa Seresco y que se basa en la agricultura de precisión. Ésta se basa "en la idea de que el terreno no es todo igual y hay que tomar las decisiones teniendo en cuenta sus particularidades", explica Cristina Monteserín, responsable del producto.

El funcionamiento de la herramienta digital parte de la observación continuada del viñedo a través de diferentes dispositivos que transmiten información sobre la humedad, la temperatura y lluvia que afectan a la parcela. Con esa información que se recoge diariamente, se procesa y proporciona al viticultor por medio de la plataforma con una serie de recomendaciones sobre que actuaciones serían las más apropiadas para desarrollar en el viñedo en cada momento. "Al final lo que se consigue es que el viticultor tenga una uva mejor, de buena calidad, mayor producción o que, por lo menos, si un año hace un vino que gustó mucho, que sepa lo que hizo para hacer que otro año le salga de similares características", comenta Monteserín.

Un punto fuerte del sistema informático es su utilidad para prevenir enfermedades que afectan a la vid a través de modelos matemáticos. Monteserín recuerda que en la actualidad la forma de actuar en viticultura es aplicar tratamientos en las viñas con determinada frecuencia con el objetivo de prevenir el ataque de enfermedades, "pero esa práctica, a largo y medio plazo, es muy problemática porque estás empobreciendo el terreno y utilizando más tratamientos de los que se necesitan", lamenta.

El presidente del Consejo Regulador de la DOP, Juan Manuel Redondo, encuentra la propuesta "muy útil" y se plantea su incorporación en las parcelas de la denominación en un futuro cercano. Redondo recalca que la monitorización tecnológica que propone la plataforma es "el mejor asesoramiento que el viticultor puede recibir en las fases críticas del cultivo, para aplicar los productos fitosanitarios o para conocer cuando las condiciones son favorables para padecer enfermedades". Por ello, el Consejo Regulador planteará la firma de un convenio con el fin de implantar la plataforma en las parcelas de control representativas de la DOP. Para incorporarse a la utilización de la herramienta informática, el viticultor tan sólo necesita contar con un usuario y clave de acceso y delimitar las zonas de actuación sobre las que el dispositivo comenzará automáticamente a recabar información a través de las estaciones meteorológicas cercanas al lugar. Si no existiese ninguna próxima, el viticultor tiene la posibilidad de instalar en su finca sus propios sensores de temperatura que le darán datos precisos de su terreno y sus viñas.