El profesor de Geografía Víctor Fernández Salinas se desplazó ayer a Viavélez (El Franco) para participar en una reunión informativa en la que la asociación de vecinos Santo Ángel dio a conocer al vecindario su solicitud para que el puerto de la localidad sea declarado bien de interés cultural (BIC). Salinas, en calidad de representante del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios Histórico-Artísticos (Icomos), explica que cualquier BIC reconoce unos valores y no se debe ver como un límite: "No tiene por qué limitar, hay que verlo en positivo, ya que podría ser una oportunidad para darle visibilidad a Viavélez".
Aunque el profesor no quiso analizar el planteamiento concreto del BIC para el puerto de Viavélez hasta reunir toda la información, explica que, a priori, "se aprecia una trayectoria que no ha muerto, lo que es fundamental porque da autenticidad al entorno". En este sentido explicó que "si la autenticidad la da la pesca, el BIC no puede perturbarla" e hizo hincapié en que no se trata de convertir el espacio en un parque temático, "ya que es un puerto vivo y ojalá siga siéndolo".
Fernández Salinas, que deberá elaborar un informe precisando si el Icomos considera o no pertinente este BIC, explica que "el patrimonio es un factor de desarrollo para los pueblos y hay que verlo como algo vivo". Está convencido de que estas iniciativas "fomentan la autoestima de los pueblos, ya que los bienes culturales son palancas de desarrollo".
Fran Suárez, integrante de la asociación "Santo Ángel", explica que llevan trabajando en la documentación para el BIC desde hace más de un año. El trabajo ya está en manos del Principado, que debe decidir ahora si incoa el expediente. "El BIC no supone ninguna cortapisa, pero puede ayudar a que las cosas se hagan bien", añade Suárez.
Los vecinos apoyan su petición en el hecho de que el puerto es el único de Asturias "que conserva la mampostería original, un trabajo artesanal que aún sigue siendo funcional". Además, hacen hincapié en la carga histórica del puerto, que durante años tuvo una importante actividad empresarial.
El gobierno local no se opone a este planteamiento de los vecinos, aunque pide que se gestione sin crispación. "Viavélez es una joya patrimonial, pero mucha gente vive y trabaja allí, así que el BIC debe de ser compatible con el desarrollo del pueblo", explica la regidora, Cecilia Pérez.
