Luarca, Valdés, y el Occidente fueron ayer un clamor. Desde la explanada del puerto de la Villa Blanca, más de quinientas personas elevaron un grito de indignación ante la situación de abandono que vive el Museo del Calamar Gigante, y exigieron una "solución definitiva" para la colección, sin hogar desde que en febrero de 2014 un temporal arrasara el edificio. La llamada de socorro, lanzada por un grupo de ciudadanos sin filiación política, logró reunir en torno a la causa a vecinos, empresarios, colectivos de toda índole, y también a dirigentes políticos, que se mostraron dispuestos a trabajar por un futuro en Valdés para el museo.

El lema elegido por los convocantes, que no se prestan a opinar sobre dónde se tendría que ubicar el museo, fue "Luarca lo necesita". "Esta concentración nace por la inquietud que un grupo de personas hemos tenido ante la respuesta agresiva del gobierno del Principado de Asturias, a través de la consejera Belén Fernández, cuando se despachó diciendo que el Principado no tenía entre sus prioridades la recuperación del espacio museístico. Fue la gota que colmó el vaso", explica uno de los organizadores, Tino Ron, que señala que el movimiento tomó impulso de forma espontánea, a través de las redes sociales. "No se puede decir a un pueblo que su sueño principal no es prioritario, y esperar que no pase nada", apuntó Juan Carlos Menéndez, otro de los implicados en sacar esta lucha adelante. Sobre la propuesta provisional para instalar la colección que partió del Principado, Menéndez considera que "sería ideal cinco minutos después de la marejada, pero no ahora, cuando la gente ha tenido que ponerse en pie". La plataforma indica que no cesarán hasta que se logre esa solución definitiva, y se prestan a colaborar y mediar, "de forma desinteresada y decidida" para lograr un futuro viable para una colección "que ha puesto a Luarca en el mapa mundial, y fue una cabeza tractora de la economía del concejo".

Luis Laria, presidente del colectivo que gestionaba el museo, la Coordinadora para el Estudio y la Protección de las Especies Marinas (Cepesma), agradeció el apoyo de la ciudadanía en un movimiento "pocas veces visto en esta comarca". Durante su intervención, Laria apeló a que el acto de ayer "sirva de pistoletazo de salida para que la identidad de un territorio no quede mancillada por muchos poderes que puedan estar establecidos". "El Occidente de Asturias y Valdés merecen más", añadió.

"Es necesario e imprescindible que el museo se repare", recalcó el regidor valdesano, Simón Guardado, presente en la movilización, que prometió "buscar todos los apoyos del mundo".