El instituto Elisa y Luis Villamil de Vegadeo volverá a estar presente, por segundo año consecutivo, en la Olimpiada matemática nacional, que desarrollará su vigésimo séptima edición en Santander, del 22 al 26 de junio. El alumno Jorge Chapero será uno de los tres representantes del Principado junto a otros dos estudiantes de Mieres y Gijón. "Ahora no estoy nervioso pero sé que cuando vaya llegando la fecha me pondré", reconoce Chapero, que tiene 13 años y es natural de Ribadeo (Lugo).
El profesor de Matemáticas Nacho Rodríguez no puede estar más satisfecho con los resultados de sus alumnos en las últimas citas, ya que el año pasado también viajó a la Olimpiada Nacional con la alumna castropolense Alba María Pérez. Explica además que junto a Chapero, también Julia Garay pasó a la final de la Olimpiada Matemática Asturiana que se celebró en Tapia. De esta cita salieron diez ganadores y entre ellos se escogió a los tres representantes de Asturias en la Olimpiada Nacional. Chapero no se lo podía creer cuando dijeron su nombre ya que no salió demasiado contento de la prueba celebrada en el instituto tapiego: "El examen me pareció difícil y no pensé que fuera a pasar".
"Jorge es un buen alumno y es bastante curioso, no se queda con una cosa sin saber el por qué y es una cualidad que ayuda mucho en estas pruebas", precisa el docente, quien explica que, lejos de lo que parece, en las Olimpiadas de Matemáticas no prima tanto el cálculo como "saber aplicar ideas y razonamientos o darse cuenta de patrones de repetición".
El estudiante confiesa su pasión por las Matemáticas, la asignatura que más le gusta. Aunque no tiene claro su futuro una vez salga del instituto, no descarta convertirse en profesor de la materia. "Antes no me gustaban tanto las Matemáticas pero ahora les veo más sentido, es la única asignatura en la que todo encaja", precisa.
Con el revuelo de final de curso profesor y alumno no han tenido tiempo de pensar en la Olimpiada. "Ahora estamos acabando el curso y lo primero es lo primero, a partir de ahí, pues hablaremos", precisa el docente. No obstante, deja claro que más allá de asistir a la cita nacional, los alumnos deben de ver la oportunidad en sí misma como un premio: "Que vaya a disfrutar de la experiencia pues yendo más relajado le irá mejor".
Cuenta el docente que participar en estas competiciones estimula a los estudiantes, que se inscriben de manera totalmente voluntaria. "Luego mejoran en la asignatura, les veo más rendimiento, más interés. Creo que la experiencia es positiva".
En unos días profesor y alumno pondrán rumbo a Santander para participar en esta cita matemática convocada por la Federación de Sociedades de Profesores de Matemáticas (FESPM) y organizada por la Sociedad Matemática de Profesores de Cantabria (SMPC).
