Cuando la pianista y mezzosoprano bilbaína Sonnia L. Rivas-Caballero conoció a la técnico de Anatomía Patológica e investigadora Belén Yuste tuvo claro que quería conocer Tapia por el "amor y la vehemencia" con los que la madrileña se refería al pueblo al que su familia peregrina cada verano desde hace cinco décadas. La madre de Yuste era originaria de Boal y quiso enseñar a su marido su tierra natal, sin saber que aquel viaje les uniría para siempre a la villa que terminó por robarles el corazón. Rivas y Yuste se conocieron hace veinte años y empezaron a colaborar en proyectos de investigación que han logrado revitalizar la figura de personajes de incalculable valor como Maria Sklodowska-Curie (Marie Curie) y Santa Teresa de Jesús. En sus trabajos conjuntos siempre está Tapia como telón de fondo y, por eso, el consistorio tapiego les confió este año la lectura del pregón que anteayer dio el pistoletazo de salida a las fiestas patronales del Carmen. Aseguran que cuando los proyectos y el trabajo del día a día las agotan siempre piensan: "Llegará Tapia y descansaremos".
-¿Qué tiene Tapia?
-Belén: Creo que no soy objetiva porque no puedo desvincular Tapia del sentimiento, pues llegué aquí por primera vez con 20 días. Es como cuando abres una caja de Pandora y salen todos tus recuerdos y momentos de infancia y juventud. Creo que mi vida es frondosa en gran parte por la savia de esas raíces que están sobre todo en Tapia. Por eso dar el pregón me emocionó porque mi corazón está en Tapia.
-Sonnia: Para empezar, Tapia es especial por el color que tiene, que es increíble. Además es un lugar en constante cambio, por el efecto de las mareas, por el propio mar, que a veces está calmo y otras veces tan bravo que es un espectáculo en sí mismo.
-¿En qué debería mejorar la zona?
-Belén: Tapia tiene un público fiel que viene siempre y que, a su vez, ha traído a mucha gente. Pero una de las cosas que le fallan a Tapia, y a la zona en general, es la conexión con el aeropuerto. Para que Tapia no sea solo un sitio de veraneo y que la gente pueda venir en fines de semana o desplazamientos cortos eso es básico.
-Llevan años trabajando en conjunto, preparando exposiciones y libros ¿Cómo se logra trabajar a cuatro manos?
-Belén: Es muy fácil porque las dos tenemos una línea de trabajo muy clara. Lo que nos importa es la unidad.
-Sonnia: Para trabajar en equipo no hay que ser demasiado personalista, lo que importa es el resultado final. Entonces yo corrijo lo que escribe Belén y tengo libertad de quitar lo que no me gusta y ella hace lo mismo con lo mío. Es un proceso muy largo porque vamos puliendo hasta que las dos estamos de acuerdo con el producto final, pero siempre con libertad plena de cambiar todo lo que considere cada una.
-Belén: De todas maneras, es muy importante, tanto en los libros como en las exposiciones, que el personaje hable. Lo difícil es seleccionar y ofrecer una visión amplia del personaje. Tienes en la mano el manipular dando tu visión del personaje y eso hay que evitarlo aunque haya cosas que no te gusten.
-Sonnia: Para nosotras lo primero es tener una empatía clara con el personaje, de hecho nos han encargado estudiar algunos que no hemos querido. Para hacer un trabajo serio hay que estudiar mucho y empaparte de él, así que tiene que interesarte.
-Belén: Hay personajes a los que no les voy a dedicar ni medio minuto de mi vida. Siempre digo que ha sido un honor trabajar a Marie Curie y a Santa Teresa porque las dos nos han enriquecido tanto...
-Una de sus colaboraciones más exitosas y prolongadas tiene a Marie Curie como protagonista. ¿Por qué les interesó el personaje?
-Belén: Llevo más de 25 años estudiando a Marie Curie. Leí a los 17 años una biografía de su hija Eva que me impactó. Creía que era una gran científica, una eminencia, pero me sorprendieron el talante humano, el compromiso social y la generosidad innata de esta mujer, y, sobre todo, cómo la habían marcado sus raíces polacas cuando yo creía, como medio mundo, que era francesa. Así empezó todo.
-¿Qué creen que ha aportado su trabajo de estos años al conocimiento de la científica?
-Belén: Hemos logrado difundir su talante humano, que la gente se empezara a interesar por la persona, no solo por la científica. Así ha llegado a todo tipo de públicos, de hecho la exposición ha itinerado por institutos, bibliotecas, ayuntamientos y hasta nos la han pedido en la cárcel de Navalcarnero.
-Sonnia: También es importante el mensaje para los jóvenes, deben comprender que con tenacidad e interés se pueden hacer cosas importantes. Y, en general, ha servido para que el gran público sepa quién fue la persona generosa que entregó su vida para que todos pudiéramos tener un tratamiento tan importante como la radioterapia.
-El éxito de esta muestra evidencia que la cultura interesa más de lo que nos hacen creer.
-Belén: Claro, según cómo se divulgue. Si haces una exposición de Marie Curie para científicos, la gente no va a ir, pero nosotras lo que hacemos es acercar el personaje al público.
-En general ¿cómo está España a nivel cultural?
-Sonnia: Hay un problema fundamental que es el de la financiación. La cultura es algo absolutamente imprescindible para el desarrollo del ser humano y es lo que transforma a la larga un país; sin embargo, es en lo primero que se recorta, y es un error gravísimo. Hay cosas en las que no se debería recortar nunca, sino al revés, como en cultura, investigación, sanidad y educación.
-Marie Curie, Santa Teresa... ¿Por qué ese interés en rescatar a personajes de la historia y sobre todo a mujeres?
-Sonnia: Los hombres han estado mucho más presentes en la historia y las mujeres han sido siempre las grandes olvidadas. Ellas han tenido más dificultades para poder desarrollar sus intereses. Vimos indignadas una serie fantástica sobre la I Guerra Mundial porque no se nombró a Marie Curie ni una sola vez, cuando creó nada menos que el servicio radiológico de la guerra, que salvó a millones de personas.
-Belén: La historia en general atrae, pero sobre todo los personajes que te aportan algo y son representativos y ejemplarizantes. Con respecto a la mujer, como decía la nieta de Marie Curie, la igualdad habrá llegado cuando mujeres sin trabajos excepcionales sean admitidas en una Academia, ya que la mujer tiene que demostrar que es absolutamente excepcional para llegar a algo cuando el hombre con un trabajo de valía ya llega. Ahora estamos haciendo un trabajo sobre mujeres con premio Nobel y se ven los desequilibrios, pues la mayoría de premios para mujeres son en las ramas de Paz y Literatura. Por eso incluiremos un apartado que diga "A punto del Nobel", porque hay claras injusticias históricas.
