Sostiene la jefa del Área de Educación del Museo Nacional del Prado, Esther de Frutos, que cada vez son más los jóvenes que no saben quién es la Virgen María o no son capaces de diferenciar un San Pedro de un San Andrés, lo que esconde carencias formativas que complican el descifrado de alguna de las obras maestras de la historia universal. "No es un problema de religión sino de iconografía, pues estamos perdiendo mucho conocimiento y eso nos asusta porque se trata de las claves para leer el arte y descifrar un cuadro", matiza esta profesional, que ayer inauguró en el Centro de Artesanía de Bres (Taramundi) la muestra "El Prado en el medio rural". Esta exposición traslada al corazón de Oscos-Eo una selección de 34 réplicas de joyas de la pinacoteca madrileña.

De Frutos lamenta que la historia del arte no sea una materia "vertebral en la educación", lo que les obliga a preparar estrategias para colarse en las aulas: "Buscamos temas transversales para que los profesores nos usen como herramienta para enseñar cosas. En este sentido, nuestra colección es bastante versátil y nos permite tratar muchos temas. Por desgracia, entre comillas, es lo que nos queda para que el museo pueda ser conocido, visitado y valorado". El responsable de contenidos didácticos del Prado, Fernando Pérez, coincide con la progresiva pérdida de conocimiento que detectan en los jóvenes que visitan el centro: "No saben historia, antes decías Carlos V y todo el mundo lo conocía, pero hoy te preguntan quién es".

Ambos profesionales impartieron ayer en Bres la ponencia "El Prado, un museo de todos y para todos", que dio paso a la inauguración y visita guiada de esta muestra, que se puede visitar hasta el 16 de octubre en el Centro de Artesanía de Bres.

Esta iniciativa constituye la segunda colaboración del Prado con el proyecto educativo Foro Comunicación y Escuela, que promueve desde hace ocho años el instituto veigueño Elisa y Luis Villamil. En 2012 se hizo una primera exposición en Vegadeo y ahora, complementada por seis nuevas réplicas, se apuesta por acercar el arte al medio rural.