La Escuela Municipal de Música de Cangas del Narcea ya ha inaugurado el curso escolar y lo ha hecho con varias novedades que pretenden aumentar la cantidad y la calidad de las asignaturas que ofrece la institución. Además, este año la escuela cuenta con un mayor número de alumnos en comparación con otros inicios escolares, con 220 matrículas, y también con cuatro profesores más, al haberse ampliado la oferta educativa, lo que supone pasar de siete a 11 docentes.
La principal novedad del curso es la intención de la escuela de salir a la calle y ofrecer su música a los cangueses. Hasta ahora, la escuela venía desarrollando el concierto de Navidad y las actuaciones de fin de curso como citas anuales para mostrar lo aprendido; este año se busca dar un paso más y ofrecer pequeñas actuaciones en diversos puntos de la villa.
"No nos podemos quedar con las clases individuales dentro de estas paredes, tenemos que enseñar al pueblo el trabajo que estamos haciendo y el esfuerzo de los alumnos", subraya el profesor José Antonio Fernández, que forma parte de la Comisión Técnica de Trabajo creada para llevar adelante este proyecto, junto con los profesores Maribel López, de folclore; Moisés Álvarez, de violín y de la escuela rock, y la directora Noelia Rodríguez. La idea es ofrecer pequeños conciertos en plena calle, en otros espacios de la villa más allá del teatro Toreno e, incluso, acudir a certámenes juveniles fuera del concejo. Para ello, la escuela estudia "formar conjuntos instrumentales, pequeños grupos por instrumentos o agrupaciones de la escuela de rock y de música tradicional e ir encajando actuaciones en diferentes momentos de la actividad del concejo, con la idea de colaborar con otras asociaciones y agrupaciones del municipio", subraya Fernández.
Para sacar adelante este proyecto, la escuela ha incorporado a su lista de materias la asignatura de conjunto instrumental con la que se busca potenciar la capacidad de los alumnos de tocar en grupo, con instrumentos de diferentes secciones. "Queremos dar la oportunidad a los alumnos de trabajar como en las agrupaciones, que al final es lo que más les gusta y les atrae, porque cuando entran en la escuela su idea es poder llegar a tocar en una banda o una orquesta", explica José Antonio Fernández. Así, la nueva materia agrupará las secciones de los instrumentos de viento, madera, metal y percusión para hacerlos sonar juntos y no por separado, como están acostumbrados los alumnos de una escuela de grado elemental.
No es la única asignatura que estrena la escuela canguesa. Este año recupera la sección de viento con la incorporación de las clases de flauta, clarinete, trompeta y saxofón, que se suman a las clásicas de música y movimiento, lenguaje musical, piano, guitarra, violín, guitarra eléctrica, bajo, batería, folclore: baile y percusión; gaita, tambor y coro.
En este sentido, la concejala de Cultura, Carmen Riesco, se siente orgullosa de haber conseguido sacar adelante la sección de viento en la escuela, después de haber pasado tres cursos sin ella. "Era uno de los objetivos del equipo de gobierno para este curso, porque buscábamos aumentar la oferta de la escuela y lo hemos hecho incorporando a cuatro profesores titulados más a la plantilla", subraya.
Aunque las clases ya han comenzado, la matrícula para algunas asignaturas seguirá abierta hasta diciembre; éstas son guitarra eléctrica y clásica, viola, música y movimiento e iniciación en los instrumentos de viento.
Para continuar mejorando su oferta musical, la Escuela Municipal de Música de Cangas del Narcea cuenta entre sus principales reivindicaciones el conseguir un espacio único en el que desarrollar la actividad, ya que en la actualidad las clases se reparten entre cuatro locales: el teatro, el Ayuntamiento y los colegios del Fuejo y Maestro Casanova. "Es nuestra principal necesidad para mejorar la imagen e identidad de la escuela, así como la operatividad, sobre todo cuando estamos hablando de hacer clases de conjuntos instrumentales", recalca Noelia Rodríguez.
