Un amplio despliegue de Guardia Civil se situó ayer en los alrededores de la mina de Cerredo (Degaña) para escoltar a personal de la empresa del grupo Alonso, Uminsa, en su labor de retirada de maquinaria de la explotación minera. La empresa había solicitado a la Delegación de Gobierno protección para evitar que se produjeran acciones vandálicas.

La corporación municipal se quejó ante Delegación de Gobierno de lo que considera una actuación "desproporcionada" de las fuerzas de seguridad. Además, el concejal de IU, Ángel Álvarez, apuntó a que la intervención "fue excesiva, con registros y controles en carretera".

Por su parte, la empresa Astur Leonesa, propietaria de la mina, interpuso una denuncia ante Delegación de Gobierno "por irrumpir en nuestras instalaciones sin ningún tipo de autorización, ni motivo", explicó el empresario Rodolfo Cachero.