La Administración regional será contundente para castigar a los dos pescadores localizados el pasado viernes tras extraer, junto a otras dos personas, veinte kilos de percebe de una roca vedada en la costa de Novellana, en el concejo de Cudillero. "Reviste especial gravedad que sean profesionales y por eso los vamos a inhabilitar, porque no hay derecho a que estén ocupando una plaza en un plan de explotación", precisa Alberto Vizcaíno, director general de Pesca, quien detalla que se les abrirá un expediente "con carácter inmediato" y se les retirará la licencia de pesca de manera cautelar y previa a lo que en su momento dicte la justicia.
Al tratarse de un delito contra el medio ambiente tipificado en el Código Penal, la vía judicial ya recoge penas de inhabilitación de entre dos y cuatro años, además de pena de presión o multa. Sin embargo, la lentitud de la justicia podría demorar el castigo, de ahí que el Principado vaya a agilizar la intervención por la vía administrativa.
"En estos casos somos lo más duros que nos permite la norma. Debemos de ser rápidos y rigurosos porque es importante disuadir al que está en el filo de la navaja, casos como este deben de tener un efecto disuasorio y servir para ejemplificar. No puede ser que hagan esto y sus compañeros los vean trabajar durante seis meses más", añade el director de Pesca, sumándose a la indignación que ha provocado en el sector pesquero esta operación liderada por el Servicio de inspección y vigilancia pesquera, con la colaboración de la Guardia Civil.
Los mencionados pescadores son profesionales en activo, ligados al plan de explotación del percebe del cabo Peñas, y el viernes participaron junto a otras dos personas en la extracción de veinte kilos de percebe de la roca La Menor, vedada hasta diciembre por ser una de las más valiosas del plan de explotación Oviñana-Cudillero, ya que se reserva para la campaña de Navidad.
El director de Pesca entiende también el malestar que el furtivismo provoca entre los profesionales del sector, pero no está de acuerdo con la afirmación de algunos patrones de que esté aumentando. "No tenemos elementos de juicio para defender que haya más furtivos, quizás sea más bien que somos cada vez más eficientes y por eso se sorprende a mucha gente", apunta el director. En este sentido, añade que lo que sí está ocurriendo es que cada vez los furtivos son localizados "con cantidades más exageradas", que no solo dañan por el producto retirado, sino también por el estado en el que quedan las piedras. "Son oportunistas y destajistas que pueden levantar 20 kilos en una marea, más lo que destrozan, porque en esas condiciones, trabajando rápido y con nocturnidad, no se actúa como un profesional responsable", añade Vizcaíno.
El Principado cuenta de manera continua con doce vigilantes que "están todo el día y todos los días en la costa", a los que hay que añadir los guardapescas ligados a los planes de explotación del percebe y contratados por las propias cofradías gracias a la ayuda económica de la administración regional. El tercer pilar fundamental en la lucha contra el furtivo es, a juicio de Vizcaíno, la Guardia Civil -tanto el Seprona como el Servicio Marítimo-, con la que mantienen "una colaboración extraordinaria y sin la que no podríamos hacer nada".
En este sentido, la Comandancia de Oviedo explica que cada año se realizan campañas específicas y planes de inspecciones para controlar la extracción en la costa occidental y que en ellas actúan las Patrullas de Protección de la Naturaleza (Papronas) de Vegadeo, Luarca y Grado. A ellos se unen las patrullas de Seguridad Ciudadana de la zona, que realizan una labor de prevención y disuasión, especialmente en momentos más sensibles como el verano o la campaña navideña.
La Guardia Civil ha realizado en lo que va de año en la costa occidental más de 21 imputaciones y detenciones ligadas al furtivismo y ha intervenido más de 222 kilos de percebes, a lo que habría que sumar las operaciones que de manera independiente realiza el servicio de Inspección Pesquera.
Las cofradías de pescadores aplauden el trabajo de ambos colectivos, pero consideran que debería penarse más la actividad delictiva. En este sentido, han solicitado una reunión con Pesca para que les informen de las actuales penas a las que se exponen los furtivos. El director de Pesca considera que el furtivismo "está suficientemente castigado", aunque se muestra dispuesto a revisar con los pescadores las sanciones que fija la vía administrativa "siempre que sean proporcionales y con base jurídica".
