El director general de Ganadería, Ibo Álvarez, ha confirmado a una representación de ganaderos de Cangas del Narcea que el equipo veterinario de la campaña de saneamiento sobre el que presentaron una queja, acompañada por 200 firmas, la semana pasada ante la Consejería de Desarrollo Rural ha sido separado.

Los ganaderos cangueses denunciaban la alarmante situación que estaba generando uno de los equipos veterinarios destinado a la zona para realizar el saneamiento ganadero, puesto que en 23 ganaderías analizadas había encontrado animales que reaccionaban a la prueba de la tuberculosis en 20, con unos 50 animales marcados, mientras que el resto de equipos llevaba cifras que no llegaban ni a la decena.

Ibo Álvarez reconoció que los datos estadísticos "llaman la atención; por eso se tomaron las medidas, primero, de que acompañara al equipo un veterinario con más experiencia y, finalmente, de dividirlo para que formaran equipo con veteranos en la campaña de saneamiento".

Como marca el protocolo, los animales cuya reacción a la vacuna ha generado duda serán nuevamente analizados en el plazo de 42 días y, en este caso, "lo hará un equipo diferente, para tener otra opinión de profesionales, y será cuando la prueba nos dirá cuáles son los resultados reales", apuntó el director general de Ganadería.

Después de este segundo análisis, "si la prueba sale negativa no quedará rastro ninguno", explicó Ibo Álvarez. No obstante, si sale positiva se aplicará el protocolo que está establecido, que supone el sacrificio de la res. En el caso de que haya una reacción dudosa, el animal quedará marcado como res de seguimiento y deberá volver a analizarse en el caso de que se realice una venta para vida.