El instituto veigueño Elisa y Luis Villamil puso en marcha en 2009 un innovador proyecto educativo que busca acercar a las aulas a personalidades de diferentes ámbitos para que sirvan de modelo y referente a los estudiantes de la comarca Oscos-Eo. Con una firme defensa de la igualdad de oportunidades para los jóvenes del medio rural, el Foro Comunicación y Escuela ha calado hondo y se ha convertido en un referente y un proyecto mimado y respetado dentro y fuera de las aulas. Detrás del Foro está un equipo de docentes liderado por el profesor castropolense Luis Felipe Fernández. Se considera un privilegiado por la oportunidad "de aportar algo desde la educación al entorno en el que he nacido y me he formado como persona".
-El martes se pone el punto y final a la octava edición con la visita del cantante Víctor Manuel. ¿Qué balance hace?
-Estoy muy contento. Hemos logrado que cada edición haya innovado respecto a la anterior. Este Foro ha logrado organizar actividades en los siete municipios de la comarca Oscos-Eo, además de en Ibias, y también hemos aportado nuestro pequeño granito de arena a un colectivo importante como es el ganadero. Se cumple así con el objetivo de vincular la institución educativa al entorno.
-¿El Foro es tal y como se proyectó hace ocho años?
-Cumplir las expectativas al cien por cien nunca se logra, pero también es bueno porque eso significa que siempre se puede mejorar. Si algo hay que destacar es que es un proyecto colectivo, que busca integrar a cuantas más personas y colectivos mejor. Después de ocho años creo que se ha convertido en un referente en el mundo de la educación, tanto a nivel asturiana como nacional. En el siglo XXI hay que plantearse nuevas fórmulas para formar a los jóvenes. Lógicamente se aprende en el aula, pero también escuchando una conferencia o participando en un debate. Debemos de formar jóvenes con espíritu crítico y para eso hay que abrir la escuela.
-¿Qué hace singular a este proyecto?
-Parte de la idea de que la escuela, especialmente la del medio rural, debe de estar abierta a la comunidad. La educación es un compromiso de toda la sociedad y necesitamos proyectos que se ocupen de instruir a los escolares, pero también a la ciudadanía. En ese sentido, el Foro está en permanente diálogo con el entorno.
-¿Qué huella debería dejar en los estudiantes?
-Si le ha servido a un joven para orientar sus estudios, para fomentar su espíritu crítico, entusiasmarse con alguna de las actividades realizadas o para ser mejor persona, creo que podemos darnos por satisfechos. Estamos ya trabajando en la décima edición y ahí seremos conscientes de su verdadera dimensión.
-¿En qué medida sale adelante gracias al apoyo de la empresa privada?
-Este es un proyecto que se plantea desde un instituto de la escuela pública y, por tanto, todos los alumnos deben de participar en igualdad de condiciones y las actividades deben de ser gratuitas. Por eso es tan importante que hayamos conseguido que algunas de las principales empresas y entidades privadas de esta región, y también empresas de la comarca Oscos-Eo, garanticen la financiación del proyecto. Es algo novedoso porque las empresas lo hacen de manera altruista, pues no obtienen un beneficio directo de la inversión que hacen. Sus responsables tienen claro que la mejor forma de hacer que Asturias y el medio rural progrese es favoreciendo una educación de calidad, y ahí está la clave.
-¿Tiene algo que envidiar la educación de la zona rural a la de la de un entorno urbano?
-Considero que las oportunidades del medio rural siguen sin ser iguales que las del medio urbano, pero también creo que un joven de Vegadeo o de los Oscos, si quiere, se esfuerza y estudia, puede llegar a cualquier lugar. Hoy cada vez la gente se siente más orgullosa del medio rural y de su entorno. No tenemos que renunciar a nada por vivir en un pueblo pequeño y debemos de sentirnos muy orgullosos. En el medio rural se pueden desarrollar proyectos interesantes, pero hace falta una apuesta de verdad desde los poderes públicos, algo que aún no se ha hecho en este país.
-Muchas veces se cuestiona el nivel y la implicación de los alumnos. ¿Cómo los ve?
-Cada generación es diferente y no se puede analizar con la perspectiva de hace veinte años. Quizás el sistema educativo debería plantearse nuevas formas de enseñar más acordes a los alumnos actuales. Los jóvenes de hoy constituyen la generación mejor formada, aunque tal vez les falta más capacidad de esfuerzo y sacrificio.
-¿Qué necesita la educación en el medio rural?
-Se ha hecho un esfuerzo importante para que las zonas rurales dispongan de una educación de calidad, otra cosa es cómo se valora la labor del profesorado. En los últimos años nuestras condiciones de trabajo, con el aumento del horario lectivo, han empeorado y eso ha provocado que en los centros se hayan dejado de hacer proyectos importantes en la formación de los jóvenes. Un país sin educación no tiene sentido y de ahí que el papel de los docentes sea clave.
-¿Ve posible un pacto de estado por la educación?
-Llevo muchos años en educación y he conocido unas cuantas leyes, por eso echo de menos un gran pacto de estado por la educación que dé estabilidad al sistema educativo durante un largo periodo y también que exista una verdadera carrera docente que regule las condiciones de trabajo y de desarrollo profesional del profesorado. Necesitamos un sistema educativo estable y espero que en la actual situación política sea posible un pacto y que de ahí salga una ley consensuada.
