Un grupo de vecinos constituirá este sábado en Taramundi la primera Junta Gestora forestal del concejo y también la primera que cumple a nivel nacional con la nueva Ley de Montes. La misión de este ente es recuperar el monte Navallo, una superficie de 375 hectáreas que está actualmente en estado de abandono. El proyecto pretende además servir de modelo para que otros vecinos de la comarca se animen a tomar las riendas de los montes proindiviso que, en muchos casos, languidecen por no tener clarificada su propiedad.
La abogada Patricia Blanco se ha ocupado en los últimos meses de poner en marcha este arduo trabajo. Explica que las Juntas Gestoras son figuras muy útiles para clarificar la propiedad de este tipo de montes, aunque lamenta lo poco que se informa de su existencia. "Lo que suele ocurrir es que el monte se registró en su momento, pero se hizo una transmisión de la propiedad a lo largo de generaciones que no quedó actualizada en el registro de la propiedad", indica Blanco, quien se ocupa de la parte jurídica.
La investigación sobre el monte Navallo ha permitido sacar a la luz la escritura matriz con fecha 22 de enero de 1962. Cuenta con la singularidad de ser una escritura de donación, ya que "lo donan los once propietarios originales a sus hijos menores". La abogada explica que la investigación aún no está cerrada por lo que podrían aparecer nuevos propietarios. Precisa esta profesional que con la nueva Ley de Montes la figura de la Junta Gestora opera hasta que no se esclarece toda la propiedad, momento en que debe de crearse una Comunidad de bienes. No obstante, explica que el cambio más sustancial que fija la nueva legislación es que se elimina el mínimo de once propietarios para crear la Junta.
El monte Navallo está "totalmente abandonado". Tien desde zonas de monte raso a pastizales, aunque la mayor parte está ocupada por castaños. Además, una pequeña parte estuvo en su momento conveniada con la administración. Blanco precisa que la Junta no tiene ánimo de lucro y su único objetivo es el mantenimiento del bosque en buen estado, de cara sobre todo a evitar un incendio. Por su experiencia, estas juntas tienen un efecto muy positivo porque además de lo emotivo de recuperar la propiedad de los antepasados, fomentan que la gente regrese a los pueblos y genera más unión entre los vecinos.
El acto se celebrará el sábado a las doce en el salón de actos del Ayuntamiento y está abierto al público en general, no en vano la idea es que sirva para informar sobre esta figura al resto del vecindario.
