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San Andrés sin "matonas"

La última gran feria del año en la comarca pierde asistencia de ganado y olvida su tradición de comprar para los sanmartines

Los ganaderos admiran varias de las vacas expuestas en el mercado. D. ÁLVAREZ

No hubo mucho ganado en la última feria de nombre del año en el Suroccidente. San Andrés se celebró ayer con una asistencia de ganado por debajo de otras ediciones, pero que no impidió que se cerrasen algunos tratos. El más comentado fue la venta de la vaca "Galana", de una ganadería de La Espina, que se fue a Mieldes por 3.700 euros. Su comprador, Evaristo Llano, aseguró que "la vaca lo vale, está marcada por Aseava, tiene una cría y está preñada de cinco meses".

El resto de ventas oscilaron entre los 1.600 y los 1.800 euros, y fueron para animales de vida, dejando atrás la tradición que envolvía esta feria hasta hace unos años de ser la destinada a la compra de "matonas" de cara a la celebración de los sanmartines.

"La tradición de adquirir aquí las matonas desapareció, en esta feria se ven vacas de vida y casi ni terneros porque ahora todo lo que es carne se vende en casa, prácticamente los que venimos es para que no se acaben las ferias", subraya el ganadero tinetense Pablo Fernández.

Los habituales de la feria lamentan que se esté perdiendo la tradición de hacer mercado y recuerdan con nostalgia cuando los recintos se llenaban.

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