Alumnos de cuarto, quinto y sexto de Primaria del colegio público de Soto de Luiña tomaron ayer el salón de plenos del Ayuntamiento de Cudillero para exigir mejoras en el concejo. Profesores y alumnos trabajaron durante las últimas semanas en este encuentro, relacionado con el estudio de la Constitución española y la democracia. Dice la directora, María Salomé Alonso, que esta actividad no sólo es divertida, "también enseña a respetar las opiniones ajenas".
Ayer, los alumnos que se convirtieron por una hora en Alcalde, secretaria y concejales, e hicieron nueve peticiones al regidor verdadero, el popular Ignacio Escribano. Solicitaron mejoras en el polideportivo y en la carretera que va a la playa de La Concha de Artedo desde Lamuño; sustituir las luminarias del alumbrado público que no funcionan; y tener plataformas de reciclado en todos los pueblos. Para el centro escolar también hubo propuestas. Los alumnos necesitan agua limpia (llega turbia al centro) y cambiar el cierre del colegio y las mesas, sillas y puertas que están más deterioradas. También pidieron la tala de los árboles del centro educativo y apuntaron la necesidad de disponer de más medios para poder practicar distintas disciplinas deportivas.
Pero si algo destacó del pleno infantil fue la intervención de la secretaria, Iris López. Al finalizar la sesión tomó la palabra para pedir alumbrado navideño para todos los pueblos de Cudillero. Tanto el público como los representantes de la corporación rompieron a aplaudir. El gobierno, el verdadero, hará todo lo posible por cumplir con las peticiones, según el edil Felipe Fernández.
