El Consorcio de Transportes de Asturias ha accedido a cambiar la parada de San Martín de Luiña de la ruta escolar y devolverla al Rosal. La empresa modificó el punto de recogida de los alumnos tras decidir hacer el servicio con dos microbuses y no con un autobús de 54 plazas. El concejal de Cultura, Felipe Fernández, tenía previsto ponerse en contacto con el Consorcio mañana, pero el acuerdo llegó ayer. A partir de mañana, los alumnos de San Martín podrán dirigirse a la parada ubicada en el Rosal como siempre. El pasado viernes los padres decidieron llevar a sus hijos al colegio de Soto de Luiña en sus coches particulares como medida de protesta. El alcalde de barrio, Sergio Arrojo, alertó de la peligrosidad de la parada propuesta por el consorcio. Según criticó, se encontraba en plena carretera nacional y en una zona con escasa visibilidad y que obligada a los alumnos a utilizar una vía sin aceras, informa A. M. SERRANO.