La Guardia Civil lideró en la madrugada de ayer una nueva operación contra el furtivismo tras localizar a tres cántabros que habían extraído 48 kilos de percebe en la costa tapiega. Los hombres, todos con antecedentes, actuaron en la zona conocida como Las Percebosas, donde se localizan las mejores piedras para este crustáceo en todo el concejo tapiego. "Están acabando con la forma de ganarse la vida de la gente", lamenta el presidente de la gestora que dirige la Cofradía de Tapia, Rodrigo Maseda.

Este profesional aplaude el trabajo tanto de la Guardia Civil como de Inspección Pesquera para poner freno a los furtivos, pero lamenta que las penas no sean más duras: "La vigilancia es efectiva y están haciendo un esfuerzo tremendo, por ese lado estamos contentos, pero no lo estamos con que no haya condenas más severas. La ley es demasiado laxa". Con todo, el concejo tapiego es uno de los que menos sufre el impacto del furtivismo, gracias, según señala el representante de los marineros, al esfuerzo de mucha gente: "Tienen mucha presión, no solo de la vigilancia, sino porque todo el mundo está pendiente. A mi mucha gente me llama en cuanto ve algún movimiento raro en alguna peña".

Precisamente, la operación de ayer se puso en marcha en torno a la medianoche del miércoles por una llamada a la Guardia Civil realizada por personal de la Cofradía. Alertaban de la presencia de furtivos en Las Percebosas, donde se localiza el mejor percebe del concejo, reservado para la campaña de Navidad. La Benemérita movilizó entonces a personal de los puestos de La Caridad, Castropol, Tapia y Santa Eulalia de Oscos, así como al Equipo de Investigación de la Compañía de Luarca (Eico). Se desplazaron al barrio tapiego de San Sebastián, donde localizaron un vehículo sospechoso, cuyo titular poseía antecedentes por pesca furtiva. Tras unas horas de espera, los agentes observaron a tres personas salir corriendo desde la zona de rocas hasta el coche y procedieron a parar el vehículo e identificar a los ocupantes. Los tres hombres están siendo investigados por un delito contra el medio ambiente.

Además, los agentes tuvieron que rastrear la zona en busca del percebe, ya que los hombres habían dejado escondido todo el crustáceo junto al material usado para su extracción, como trajes de neopreno, rasquetas, gafas y tubos de buceo.

Esta operación es la tercera contra el furtivismo de percebe que se registra en los últimos dos meses dentro de los planes de explotación del percebe del Occidente. El 8 de abril personal del Servicio de Inspección Pesquera localizó a cinco cántabros en Muros de Nalón con 60 kilos y el pasado 29 de abril hizo lo propio con dos gallegos a los que sorprendieron con 20 kilos en la punta de La Cruz (Castropol).