El gobierno tapiego está acometiendo obras de remodelación en la Avenida de Galicia, la arteria principal que regula el tráfico en la villa, para mejorar la seguridad vial y eliminar barreras arquitectónicas. Los trabajos pasan por ampliar aceras, elevar dos de los pasos de peatones existentes y suprimir algunas plazas de aparcamiento para mejorar la visibilidad de los cruces. Esta actuación se enmarca en el plan general de reordenación y mejora del tráfico en la villa, que se puso en marcha a principios del año pasado y que seguirá en el barrio de La Corredoira, aunque lo más probable es que sea después del verano.

En lo referente a la Avenida de Galicia, se ha renovado el tramo de acera que enlaza esta vía con la calle Marqués de Casariego y se van a señalizar mejor los dos pasos de peatones que existen entre la cancha de baloncesto y la parada de autobuses. "Había mucho desnivel y eran puntos peligrosos. Ahora el paso para los vecinos va a quedar al nivel de la calle", precisa el Alcalde tapiego, Enrique Fernández.

Además, se mejorará la visibilidad en la intersección de la Avenida de Galicia con Francisco González Villamil (delante del hotel La Ruta). "Se va a hacer una pequeña modificación, retranqueando los aparcamientos para ganar visibilidad en ese cruce", añade. Del mismo modo, se actuará en otra perpendicular, la calle Gonzalo Méndez de Cancio, donde se va a realizar una ordenación de los aparcamientos "para mejorar la visibilidad y la circulación".

Explica el regidor que se trata de "obras pequeñas pero que funcionan bien y la gente agradece". Se suman estos trabajos a los acometidos recientemente en el entorno del puerto, donde se renovaron dos tramos de aceras y creó un punto de reciclaje soterrado.

De manera paralela, el gobierno local tiene listo el primer borrador para reordenar el barrio de La Corredoira y las zonas aledañas. "Actuaremos en una zona más amplia, entre Los Campos y el cementerio", precisa el Alcalde, que quiere mostrar previamente la propuesta a la oposición socialista. En este sentido, considera que puede ser prematuro acometer los trabajos antes del verano, así que lo más probable es que se retrase al otoño.

En esta segunda fase de la reordenación del casco urbano también se favorecerá la circulación estableciendo vías de sentido único. "Las calles de sentido único dan más comodidad, facilitan el aparcamiento y evitan problemas por la estrechez de las vías", apunta el regidor. Esta segunda fase, completa la reordenación acometida a principios del año pasado, que afectó principalmente a las calles Santa Rosa y Marqués de Casariego.