"Hay formas de violencia más sutiles y no por ello menos peligrosas. Tienen su origen en los soportes digitales, pero también son violencia de género", advirtieron ayer en Tapia los estudiantes de Valores Éticos de los institutos de Vegadeo, Tapia y Navia durante el IV Encuentro de Bioética en las aulas. Los alumnos concluyeron en su análisis que hace falta más formación a edades tempranas para saber identificar estas actitudes y acabar con las relaciones tóxicas.

"La violencia de género no tiene edad" fue el primero de los dos casos planteados en esta jornada, un tema que los docentes pusieron sobre la mesa para concienciar a los jóvenes sobre las nuevas formas de violencia. "Hay conductas que entienden como una expresión de amor y que son un indicio de violencia de género. El problema es que vean normales cosas que no son admisibles en una relación de pareja", resume la docente tapiega Azucena García. En este sentido, el profesor naviego Juan José Alonso advirtió a los chavales de que "no se puede perder la privacidad y dejar que otra persona te controle".

El segundo caso de debate se centró en la adicción al móvil, un problema que los jóvenes reconocen abiertamente pese a "no hacer nada al respecto". En las conclusiones indicaron que "no hay información suficiente sobre la adicción y la administración no realiza una buena investigación".

140 alumnos

El docente Faustino Loy considera que el encuentro demuestra que con coordinación se pueden hacer "cosas estupendas" y que "los jóvenes tienen mucho que decir". En la cita participaron 140 alumnos, menos que en las ediciones anteriores cuando existía la asignatura de Ética como materia troncal en la ESO.