Varios pinchazos en las ruedas de coches y tractores han llevado la familia compuesta por Eloy Álvarez y Marisol Tablado a denunciar el estado en el que se encuentra el camino público que da acceso a su casa en el pueblo de Genestoso, en Cangas del Narcea. En un tramo de pocos metros se puede ver en varios lugares el claro desgaste del hormigón, asomando ya el mallazo de obra. Además, las varillas de metal se están levantando en varios puntos de forma peligrosa.

"No ganamos para ruedas, está justo a la salida del garaje y de la puerta de casa", explica Eloy Álvarez, que considera que no están pidiendo nada extraño. "Es muy poco camino y solo queremos que lo cubran de hormigón para no tener este problema", apunta.

En Genestoso se realizó el año pasado una obra de saneamiento y pavimentación con un coste de 800.000 euros. Sin embargo, ese camino se quedó fuera, al no ser necesario levantarlo para hacer la canalización. Los vecinos aseguran que el Ayuntamiento se comprometió a llevarlo a cabo, pero esperaban que fuese de forma más rápida. La concejala Laura Álvarez asegura que se tiene en cuenta esa necesidad, "pero son muchos los pueblos que debemos atender y los efectivos técnicos son los que son".